Estoy Bien y el éxito de "Apoyo Emocional"

(Publicado originalmente en revista #Rockaxis248, febrero de 2024)

 

Investidos de un estilo cargado al pop punk, el hardcore y el emo, los santiaguinos Estoy Bien consolidaron su trabajo de más de tres años en la escena capitalina con “Apoyo Emocional”, un disco que se alzó como uno de los mejores lanzamientos de 2023 no solo por su impecable sonido, sino que también por letras cargadas de vivencias personales y por su soberbia performance instrumental. Una nacida desde la sala de ensayo y que se refleja en los 15 temas registrados en tan solo dos jornadas en Estudios Del Sur.

 

Por Oliver Arriola

Fotos: Felipe Donoso

 

Pino (batería), Mati (Bajo) y Benje (guitarra y voz) son los responsables de esta hazaña que se venía fraguando desde 2022 y que por fin pudo ver la luz a finales de 2023. Eso sí, antes habían liberado varios sencillos para tantear terreno entre los fanáticos, pero para nada se preveía el recibimiento que tuvo el disco al momento de su lanzamiento. La prensa especializada, la crítica y los fanáticos simplemente se rindieron ante esta gran obra que rememora los mejores años del punk melódico y el emo. Aún con incredulidad y orgullo por el trabajo hecho, Mati y Benje, desglosan los pormenores de su flamante “Apoyo Emocional”.

 

– El disco fue grabado en Estudios del Sur. Cuéntenme cómo fue ese proceso.

– Benje: Llegamos como de “chiripazo”. En un momento estábamos cotizando distintos estudios, habíamos considerado grabar baterías en uno y guitarras en otro, y en un momento nuestro amigo y tour manager Seba Silva (de Joyboy, uno de nuestros sellos), hizo la movida de contactarnos con Carlos Doerr, el productor del disco. Carlos ya había trabajado en Estudios del Sur y nos ofrecieron este paquete de ir a grabar allá junto a él, y de alguna forma nos salía más a cuenta. Y como teníamos muchas canciones, tuvimos que aprovechar las dos jornadas bien condensadas y hacerla de una.

 

– ¿Se grabó todo el disco en dos jornadas?

– B: Instrumentalmente se grabó así. Después se grabaron las voces finales en Estudio Sultán por separado, y también overdubs de algunas guitarras, pianos, coros y todo eso.

 

– Eso explica el sonido base del disco. Lo grabaron en vivo los tres juntos, es como traer el sonido de la sala de ensayo.

– B: Eso es lo que queríamos lograr, por eso elegimos a Carlos para producir. Sabíamos que nos podía producir en un lugar donde podíamos tener un espacio grande para tocar como si estuviéramos en la sala de ensayo, pero con amplis brígidos.

– Mati: Claro, teníamos de todo lo que podíamos requerir, como instrumentos, amplificadores y baterías para tal o cual canción, había muchas opciones.

– B: Era como estar en una dulcería.

 

 

– ¿Y cuál es su balance del trabajo con Carlos Doerr?

– M: Carlos nos pareció que era perfecto para lo que queríamos. Había trabajado con bandas de rock y no era un productor de indie.

– B: También como que el rollo de Carlos es súper de alta fidelidad y nosotros también queríamos dar ese paso que se diferenciaba de todo lo anterior que habíamos sacado. Lo anterior había sido autoproducido, ya sea en casa o en el ensayo o en el estudio de alguna universidad. Pero ahora quisimos que se sintiera el salto y que se notara que estábamos en un estudio bacán y poder capturar todo de una forma súper hi-fi, pero que siga teniendo carácter.

 

– Y al momento de proponer influencias para el disco, ¿cuáles fueron las de “Apoyo Emocional”?

– M: El primer disco de Idles, que es “Brutalism” (2017), tiene un sonido de bajo muy presente, como que lleva el disco, a mí me gusta la presencia del bajo. Y el Pino siempre con las baterías grandotas como Deftones hasta de repente medio Red Hot, sus discos noventeros que suenan grandes.

– B: También hay guitarras bien noventeras como del skate punk, del emo y del rock alternativo noventero. Bandas como Weezer, guitarras gordas y muy presentes. Es un disco súper noventero en cuanto a su producción, como que fue bien “vieja escuela” en ese sentido.

– M: Siento que el salto al hi-fi fue porque teníamos de referencia lo que hizo Green Day desde el “Dookie” a como suena el “American Idiot”. La guitarra, el bajo y la batería y todo tiene una presencia muy marcada, y si sacas alguno de esos elementos, se cae.

 

– ¿Por qué el disco se llama “Apoyo Emocional”?

– M: Fue un nombre que llegó poco antes de publicarlo. Esto lo grabamos el 2022 y de ahí al 2023 había varias letras listas de los singles que iban saliendo. La última que terminamos fue justamente ‘Apoyo emocional’. Estábamos con Benje un día, dijimos, «ya, tenemos que terminar esta canción, son siete minutos, que hueá».

– B: Básicamente fue un «cómo hacemos pa’ que esta wea’ quede bien». Igual la música te lleva a un espacio mental en donde quieres comunicar algo. Está como la idea del estómago de querer comunicar algo y otra cosa es el ejercicio lírico y narrativo.

– M: Me acuerdo de que para ‘Apoyo emocional’, Benje ya tenía algunas ideas como frases anotadas y yo lo ayudé a armar la estructura y a generar más frases. Y cuando terminamos esta canción y la fuimos a grabar, hacía mucho sentido que el disco se llamara así porque resumía la idea muy general de todo.

 

 

– ¿Las letras las escriben entre ustedes dos siempre?

– M: Generalmente sí. Hay algunas que son de Benje y otras que son mías, otras que son de ambos. Y también hay intervenciones del Pino.

– B: A pesar de que la idea venga de uno completa o bien armada, siempre se somete a que los tres la escuchemos, a que los tres revisemos. Terminan siendo las canciones de los tres.

 

– Las letras son súper personales, de vivencias tristes o de procesos que pasan en la adolescencia y que uno acarrea hasta la adultez. ¿Ese fue un camino consciente que tomaron a la hora de escribir?

– B: Si, totalmente, eso es. Siento que para los tres la banda ha sido una vía catártica de liberar esos traumas, ideas, procesos o escenarios mentales que uno se arma. Creo que todas las canciones son súper personales, no hay nada de ficción en el disco.

– M: Es brígido como muchas de las cosas que decimos en las letras nos cuesta mucho decirlas normalmente en nuestra vida. Entonces también fue un proceso súper íntimo entre nosotros tres, como de hablar de ciertos temas, generar instancias muy emocionales entre nosotros para terminar canciones. Creo que es lo más sincero que pudimos hacer.

– B: Ahora lo otro es el cómo lo cuentas. Cómo haces para que todo eso calce en una rima. Obviamente hay que cambiar tiempos verbales, pero son vivencias reales. Son cosas que nos están pasando, cosas que pasaron, cosas que nos da miedo que pasen. Es un disco bien biográfico de nosotros, como medio un documental de nuestras vidas.

 

– El disco cuando se lanzó le fue muy bien. Se siente que rompió la barrera de la banda indie más bien nueva como ustedes, y fue el favorito de varias listas y recuentos del año. ¿Cómo se tomaron ese reconocimiento?

– B: Es muy lindo eso de sentir el reconocimiento por lo que uno hace. Es raro igual, porque uno igual a veces se autosabotea, como que dan ganas de que no te pesquen. Pero a nivel administrativo y de producción pensábamos que se nos iba el 2023 y teníamos que sacarlo. Pero al final fue muy bacán ver que, a pesar de haberlo sacado muy tarde en el año, no fue algo que nos tirara para abajo. Son esas cosas que te dice la gente de la industria, pero lo que manda es la música. El disco le ha gustado a muchas personas y eso es bacán. Y lo de las listas dignifica mucho el trabajo que uno hace y te tira para arriba, y en general a todo el equipo que hay detrás. Siento que igual es valioso que algún cabro o cabra te publica en su historia de Instagram y te diga lo mucho que significan las canciones. Es muy lindo pegar a un nivel tan personal, es algo que no es cuantificable.

 

 

– Igual es un disco complejo y en momentos no es fácil de digerir y es súper valorable que haya tenido esa repercusión.

– B: Siento que eso está bacán del panorama nacional actualmente. A fin de año se repetían muchos nombres nacionales y esa hueá es la raja. Además, son personas amigas nuestras, como Niña Tormenta, Asia Menor, Candelabro y la Chini.png. Y da la sensación de que todos estamos haciendo música bacán y como que nada está pegando en el mainstream, es solo música alternativa y es muy rico eso. El panorama nacional está brotando mucho creativamente y sentir que de nuestro lado estamos aportando desde el pop punk o del emo es la raja. Porque igual son géneros que en su historia son medios difíciles de que lleguen, sobre todo acá en Latinoamérica.

 

– Hablemos de los invitados del disco: está Simón Campusano de Niños del Cerro y Tam Rivas de Chances. ¿Cómo nacieron estas colaboraciones?

– M: En los últimos meses del disco, conversando con Simón se nos ocurrió la idea de colaborar en una canción haciendo la letra desde cero. Igual al principio habíamos pensado en no hacer un disco con colaboraciones, pero como salió esta con Simón, pensamos en que ya, puede haber otra más y se nos ocurrió contactar a la Tam, porque nos gusta mucho Chances y creemos que podía aportar mucho a nivel vocal. Ella cantó en ‘Piedra’, que es como el tema más metalcore que tiene el disco y calzaba perfecto.

– B: En el tema que cantó Simón, que es ‘El sonido de las campanas’, como que escuchas su parte y parece una canción de él. Que la puede estar tocando con una guitarra de palo, pero a él igual le encanta el pop punk, tenemos muchas influencias en común y ese tema es justo muy ese estilo. Y fue la raja, porque tuvimos la visión de una persona que compone de forma distinta a nosotros y es bacán entender otras dinámicas de composición. Aprendimos mucho de nuestro amigo.