NOES Fest: la unión hace la fuerza

Sábado 24 de agosto, 2024
Sala Metrónomo, Santiago

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Son pocos los géneros musicales en los que se siente tanto el sentimiento de hermandad como en el hardcore. Ya sea por las letras que reflejan una realidad en común, o los acelerados compases que te invitan a ser parte del descontrol, siempre conecta a un nivel más íntimo con el público. La primera versión de NOES Fest fue una muestra de aquello, de un interés que va creciendo en los que ven en el hardcore la oportunidad de pertenecer a algo más cercano a una familia.

Organizado principalmente por Chances, Motormanagment y La Mala Religión, la velada estuvo marcada por una gran convocatoria y bandas de muy alto nivel. Desde las que enriquecían su propuesta con sonidos más atmosféricos, las que presentaban una re-imaginación desde lo alternativo, pasando por algunas que evocaban una fuerte influencia nu metalera, hasta las más tradicionales donde el hardcore se mostraba en estado puro. NOES Fest fue diversidad, autogestión, pero sobre todo un aguante que se vio desde temprano.

 

Los primeros en debutar en fueron los chicos de Relámpagos, ante una cantidad bastante generosa de público. Bien por quienes optaron por apoyar desde temprano. Aunque los nervios pudieron ser altos, se nota que la experiencia que han ganado desde su debut en vivo -hace dos años- ha servido para ser un número de apertura contundente. Fue un buen repaso que nos llevó a través de su sonido más melódicos y atmosférico con 'Arboleda' y las grandes canciones de “Temporada de Tormentas” ('Primaveras', 'Avanzar', 'Agrietados' y más). Incluso nos dieron un buen adelanto de lo que será el primer álbum de una banda que se nota que está haciendo las cosas bien.

 

No solo los nacionales tenían este desafío de tocar y dar una buena primera impresión, pues inmediatamente tocaba el turno de que Cidadão Mal conectara con un público expectante a lo que los brasileños ofrecerían. Las canciones de su opus debut “Ciudão Mal” (2024) fueron poderosas y tenían una respuesta un tanto más tímida en quienes por primera vez lo escuchaban. Aunque la cosa cambió con 'Inferno', una explosión que de energía que se vio en un público que se agitó sin descanso. El enganche fue mutuo y los lazos dan la impresión que llegarán a ser duraderos.

 

De las diversas conversaciones que se daban a esa hora, había un nombre que se repetía con bastante entusiasmo: Mano de Obra. Y es que no era para menos si sus presentaciones son reconocidas por su potencia. Hardcore en su estado más puro que estalló apenas los primeros acordes de 'Ya Quisiera' comenzaron a sonar. El compañerismo que se veía entre Javier Martínez y quienes de tanto en tanto tomaban el micrófono para cantar aquellas letras que tan fuerte pegan era contagioso. Con un extenso setlist que tradujo el explosivo carácter de sus canciones en poco más de media hora, los de Quilicura demostraron porqué son una de las bandas más relevantes de la escena del hardcore nacional y dejaron un torbellino de golpes y patadas que será difícil de olvidar.

 

La vara y los ánimos a esa hora estaban por todo lo alto y con esto Elnueveonce tenía clara su misión, que la cosa se mantuviera así. Más que lograrlo sólo con su potente música, sin duda que fue gracias a la energía que el propio Naza Antolini tiene sobre el escenario. Con su potente vozarrón y carisma del que pocos pueden presumir, la banda trasandina conquistó al público chileno de inmediato con 'Mientras Respires', 'No Digas Eso' o 'A Cada Paso'. Quizás uno de los momentos más icónicos fue ver sobre el escenario a Ignacia Fernandez de Decessus para cantar 'Manipulador'.

Con Nazareno cantando desde el público, Elnueveonce cerraba una presentación impecable en nuestro país para darle paso a los chicos de Estoy Bien. El entusiasmo con que siempre se les recibe es algo que destaca la importancia de un trio que marcado a un público que conecta con cada una de sus canciones y letras. Desde piezas marcadas con una fuerte presencia indie como 'Frente a Frente', 'Vuelves' o 'Piel' hasta el contúndete guitarreo que tienen temas como 'Ahora', 'Tus Frías Tardes' o 'Piedras' junto a la gran Tam Rivas. La banda dio un excelente recorrido por “Apoyo Emocional” y otros clásicos que siempre se agradecen ver.

 

El plato fuerte llegaría pasado las 22 horas, cuando Chances se subía para darnos una presentación de altísimo nivel. Eran los favoritos y fueron recibidos como tal. Su setlist no sólo estuvo enfocado en demostrar el poderío que su homónimo de 2023 nos dejó con 'Condena', 'Primero en Caer', 'A medias', o 'Panóptico', sino también en traer aquellas de sus inicios que fueron recibidas con bastante entusiasmo, y cómo no si los coros de '103' y 'Pasado Oscuro' son para gritarlos a todo pulmón. Sin duda que con Tamara Rivas la cosa es distinta, la emocionalidad está presente en cada grito desgarrador y se combina perfectamente con el atmosférico sonido que dan las guitarras de Matias Figueroa y el resto de la banda. Destacar también lo bello que fue ver a la banda junto a Nazareno de Nueveonce para tocar 'Druidas' o con el Benje de Estoy Bien para darnos 'Pasado Oscuro'. Chances es de esas bandas que en el estudio transmiten una cosa pero que sobre el escenario dan otra totalmente distinta y eso siempre es fenomenal.

Por muchas diferencias que hubiera entre cada una, todas se sentían bajo un mismo objetivo en común, enriquecer una escena que cada vez crece más y que se ha sabido ganar de un espacio importante entre un público más juvenil que conecta gracias a letras y melodías que no encuentran en todas partes. Un aplauso también para la producción que armaba y desarmaba el escenario rápidamente entre cada banda, esperemos que esto no sea cosa de una sola vez, pues si algo tuvo Noes Fest, fue buena música y artistas de un nivel que nos hace ver que la escena nacional da para mucho más de lo que todos creen.

Aarón Vergara
Fotos: Hernán Urtubia