Conténtate con poquito

2018. Independiente/Mauco Records
La propuesta lírica y sonora de Carolina Holzapfel es inédita en el canon musical chileno femenino. Pianista de formación académica tocó, por ejemplo, con Los Blops en su reunión de la década 2000-, cantante de carácter y compositora/letrista iconoclasta, su exhuberante invitación musical se aleja de la perspectiva femenina que habla desde la fragilidad. Al contrario, Holzapfel asume una voz empoderada y frontal que, claro, ahonda en temas que harán sentido a sus congéneres, pero que, en general, son problemas político/sociales que afectan a todos por igual.
Sucesor de Selfie (El Templo Rekords, 2016), el trío de la autora lo completan Pablo Contreras en bajo y Raúl Díaz en batería. Juntos logran un sonido de rock ruidoso e inclemente, que está lejos del pop más inofensivo de artistas como Francisca Valenzuela o Javiera Mena. De partida, su voz desgarrada y muchas veces declamada, remite a cantantes del mundo anglo: Diamanda Galás, Lydia Lunch, Jarboe o, incluso, PJ Harvey.
Conténtate con poquito cuenta con 10 temas, que la propia titular describió como noise dramatic rock, una versión más urgente y oscura que el pop dramatic rock, que la artista plasmó en Selfie. El disco abre de inmediato con fuerza inusitada con las notas disonantes y ruidosas de Pastel, pieza que narra sin tapujos cómo las mujeres caen rendidas ante tipos ególatras, irresponsables y drogadictos, que solo piensa en ellos. Holzapfel describe la situación de manera directa y locuaz, mientras los sonidos crecen en intensidad.
Gigante comienza con un piano y una voz misteriosa y a la vez sarcástica, que, de pronto, explota con furia instrumental y desenfado vocal, para luego pasar a la más calmas, sensibles y filosóficas pero no por aquello menos inestables y exploratorias- Ley de gravedad y Yo no puedo, en las que Holzapfel exhibe su amplitud como creadora. En la segunda pieza, se puede escuchar, sin aspirinas metafísicas: En este espacio humano tan extraño/Nadie puede alzarse contra la muerte/Inevitable llegará.
El tema homónimo que, líricamente, es entre una ironía y la constatación de que no queda otra más que conformarse con múltiples injusticias, comienza con la situación de la mujer frente al hombre, pero luego se amplía a las miserias y abusos provocados por la precariedad laboral, la superficialidad de los medios de comunicación, las pensiones de hambre y las inaceptables diferencias sociales. Todo aquello en un contexto de explosión sonora visceral, llena de ruidos penetrantes y quiebres inesperados. Colores nuevos es el tema más extenso del disco: una reflexión personal sobre la felicidad, que se acerca a la canción confesional: Siempre fui la rara, declara. En la parte musical, batería, bajo distorsionado y piano, van creando la superficie sonora ideal para la lírica y la melodía vocal.
El noise despiadado de Esto está bien, la más docta Golpecitos en la puerta, la experimental que recorre distintos estadios sonoros Sin estrategia y el gran cierre con Se esconde el sol, completan un álbum de ímpetu y vigor lírico e instrumental que no da tregua y que ensancha una obra musical arriesgada, sin tapujos ni compromisos comerciales de ningún tipo y que exhibe a Holzapfel, como una artista única en el contexto de la tradición musical chilena.
Tags
Ultimos Contenidos