Glenn Hughes

Resonate

Lunes, 05 de Diciembre de 2016

2016. Frontiers

Este es el disco más duro y heavy que actualmente puedo hacer sin sonar con la oscuridad de Fused, el álbum que grabé con Tony Iommi, dice Glenn Hughes en una entrevista refiriéndose a su nuevo disco Resonate.

Efectivamente, se trata de la placa más rockera y contundente que La voz del rock ha grabado en mucho tiempo, aunque en términos generales y tratándose de un buen álbum, al disco le falta la chispa y magia guitarrera que le podría haber aportado Doug Aldrich con quien el bajista realizó un show de antología en Chile. Secundado por Soren Andersen en guitarras, Pontus Engborg en batería y Lachy Doley en teclados, además de Chad Smith de Red Hot Chili Peppers en la batería en dos canciones, el ex Deep Purple abre con Heavy, mostrando el gran nivel que con 65 años a cuestas, aún posee como bajista y como cantante.

My Town sigue la misma senda de la apertura, con una base rítmica bien dura pero con una línea melódica vocal de esas tan propias, que en la voz de Hughes suenan a terciopelo. La presencia del color púrpura en la gama cromática de la portada no es antojadiza ni gratuita, pues ahí está la estupenda Steady que con su órgano Hammond B3 trae toda la herencia Deep Purple que el cantante lleva en las venas, constituyéndose como uno de los mejores momentos del álbum. God of Money recuerda precisamente la contundencia del citado Fused junto a al maestro Iommi, un trabajo que debió haber tenido una mucha mayor repercusión dada su calidad.

La pausa y la delicadeza cadenciosa la pone el medio tiempo blusero When I Fall donde la voz de Glenn suena absolutamente seductora y convincente, mientras que en Landmines encontramos el funk rock indeleble que siempre ha cultivado el cantante, que le ha valido ser denominado como el Stevie Wonder blanco por su voz llena de soul. El cierre con Long Time Gone también lleva algo de ese funky rock donde la batería de Chad Smith le da mucha vitalidad a la canción. Como bonus track se adjunta la increíble y desnuda balada acústica Nothings the Same, donde sólo con guitarra y voz, el tema conmueve hasta la médula, en una gran interpretación vocal de Hughes que tanto en estudio como en vivo, sigue cantando como uno de los grandes.

Resonate supera a los trabajos de Black Country Communion y California Breed, pero aún así podría haber sido más brillante si hubiese contado con Chad Smith en todas las canciones y de haber tenido a Doug Aldrich grabando las guitarras. La voz del rock sigue fuerte y saludable.

Cristián Pavez