Jinjer

Macro

Viernes, 08 de Noviembre de 2019

2019. Napalm Records

Sería muy fácil empezar a hablar de Jinjer a partir de sus exitosos números en distintas plataformas cibernéticas, pero la verdad es que el cuarteto se sostiene en los pilares que por décadas han sido las bases de toda carrera musical digna de admiración: un directo letal y una discografía de alto calibre. Con “Macro” (2019), el segundo punto sigue estando cubierto gracias a un disco potente que reafirma su postura editorial y también deja la ventana abierta para que empiecen a entrar los vientos de cambio, todo en medio de un importante momento para la banda en que deben cimentar su meteórico ascenso y demostrar de qué están hechos frente a las dudas legítimas que puede levantar una cuarta entrega. ¿Logran mantener el momentum? ¿Aún se justifica el hype? ¿Cómo les afecta la visibilidad que han ganado?

Cuando las respuestas se transforman en canciones tan contundentes como ‘On the Top’, ‘Pit of Consciousness’ o ‘Pausing Death’, no queda espacio para más cuestionamientos. El tándem conformado por el guitarrista Roman Ibramkhalilov y el bajista Eugene Abdukhanov produce momentos realmente emocionantes, tanto en las alturas de los riffs más agresivos como en las profundidades de los pasajes más oscuros, sumergiendo al oyente en pantanos sónicos de distorsión muy densa. Durante todo el disco, el péndulo entre la violencia y la calma se mueve armónicamente a fin de revelar la equitativa distribución de dos fuerzas que no son antagónicas, sino complementarias. Mucho de ese poder es obra del riguroso Vladislav Ulasevish en la batería, cuyos blast beats en ‘The Prophecy’ exprimen la virulencia de una canción salvaje y expone las bondades de una base instrumental en total control de sus capacidades.

Ejerciendo siempre su rol de líder, Tatiana Shmailyuk se pone al frente de esta horda de composiciones furibundas con su distintiva voz y no decepciona. La belicosidad de ‘Home Back’ retratando las disputas del conflicto entre Rusia y Ucrania, los abismales guturales de ‘Noah’ que reconstruyen la historia bíblica de singular manera y la elegancia nocturna de ‘lainnereP’, vestida con un solitario piano y atrapantes bases electrónicas, exhiben a una vocalista inigualable que no conoce fronteras cuando se trata de romper esquemas. De hecho, las infusiones de reggae en ‘Judgement (& Punishment)’ dejan un buen sabor de boca, ya que Tatiana vierte su experiencia en ese género con total naturalidad para brillar en uno de los mejores cortes del registro. Además de su ductilidad estilística, es un verdadero placer escucharla cantar en ucraniano en los primeros versos de ‘Retrospection’, una muestra cultural que siempre es bienvenida en bandas cuya lengua materna no es el inglés y una evidencia de lo interesante que sería escuchar un disco completo en su idioma.

Habiendo degustado el aperitivo del EP “Micro” a principios del 2019, “Macro” llega como el plato principal para ratificar la receta probada que sugiere el combo europeo. El progresivo, el djent, el groove, pero también el jazz y el reggae se mezclan tan bien en estas nueve canciones que incluso vale la pena preguntarse si estos elementos aledaños tomarán mayor control en futuras entregas, lo que, a su vez, abriría la puerta para sorprender con nuevas texturas o incluso suavizar su propuesta para alcanzar a otros públicos. Al menos en esta pasada, “Macro” sigue las pautas metálicas del grupo manteniendo el foco, haciendo gala de su momentum y entregando todos los argumentos para justificar por qué lo suyo no es mero hype. ¿Será este el comienzo o el final de una etapa en la carrera Jinjer? Solo el tiempo lo dirá.

Pablo Cerda