Walking In The Shadows

2016. Dissonance Productions

La friolera de 29 años tuvieron que pasar para que una de las leyendas de la New Wave Of British Heavy Metal pueda estar de vuelta con su cuarto disco de estudio. En efecto, el último lanzamiento de Grim Reaper, el espectacular y clásico “Rock You To Hell” se produjo en 1987 y su vocalista y único miembro original remanente, Steve Grimmett contó que este nuevo álbum se vino armando en los últimos veinte años.

El material de “Walking In The Shadows” es todo original, no hay regrabaciones de clásicos ni nada de eso, doce nuevas canciones donde Grimmet comparte créditos con el guitarrista Ian Nash, el bajista Chaz Grimaldi y el baterista Mark Rumble. Comenzando con dos cortes más “contemporáneos” o al menos que suenan como emergidos de los noventas, como lo son ‘Wings Of Angels’ y el tema que le da título al disco, es a partir de la tercera canción, ‘Reach Out’ donde aparecen los clásicos riffs marca registrada de la banda y todo el material se vuelca por completo al sonido ochentero de sus tres discos publicados.

Es una lástima que el guitarrista original de Grim Reaper Nick Bowcott, con quien Grimmet hacía una gran dupla en la composición, no esté presente en el disco al menos como invitado en algunos solos, hubiese sido un bonito gesto para los fans, considerando que Bowcott el año pasado se subió a tocar algunas canciones con el grupo en un show en Estados Unidos. De esta manera, es la voz de Grimmet la que le da el “toque” Reaper al disco junto a los riff asimilados por Nash, como en la ganchera ‘From Hell’ que suena clásica a más no poder, con el tono vocal característico de Grimmet, aunque en una afinación más baja, ya que con el paso de los años era prácticamente imposible que el corpulento vocalista pudiera volver a cantar realizando esos agudos imposibles de 8 octavas.

El disco no defraudará a los fans de la guadaña, las canciones están ahí y el estilo característico, ese heavy melódico con riffs punzantes y doble bombo como ‘Call Me In The Morning’ o el gancho inmediato de ‘Rock Will Never Die’, siendo el álbum una continuación natural desde “Rock You To Hell”, aunque sin contar esta vez con la producción excelsa de un gran y legendario productor como Max Norman. En el nuevo plástico todo está hecho de forma más humilde pero con pasión, como queda claro en ‘Thunder’ con un Grimmet dando todo lo que tiene en la actualidad.

Los seguidores y conocedores de la carrera de Grim Reaper sentirán que la espera valió la pena y no quedarán decepcionados con la placa; al contrario, estamos ante esos discos que van creciendo paulatinamente con las sucesivas escuchas y que seguramente traerán de vuelta a Chile a la banda a presentarlo. Ese riff inicial de ‘Blue Murder’ sin duda en vivo debe sonar matador. Un lindo y emotivo regreso.

Cristián Pavez

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