Femejism Lunes, 13 de Febrero de 2017 2016. Nevado RecordsAparte de tener que dar explicaciones hasta el infinito sobre cómo se siente ser mujer y ser rockeras, las dos californianas que integran Deap Vally van a toparse siempre con otro problema: lo infinitamente derivativa que es su música. Con su primer disco, "Sistrionix" (2013), trataron de adaptarse a los requerimientos de un sello grande y terminaron haciendo básicamente una versión femenina de los entonces muy en boga Black Keys. Un paralelo elogioso, de seguro, pero que las terminó persiguiendo por todos lados y fue un estorbo en el desarrollo de una personalidad propia. Ahora, en calidad de artistas independientes, regresan con "Femejism" y tropiezan con la misma piedra. El disco lo produce Nick Zinner de los Yeah Yeah Yeahs, que actúa igual que Robin Guthrie cuando transformó a Felt en una sucursal de Cocteau Twins: deja su marca en el proyecto, convierte a la guitarrista Lindsey Troy y a la batera Julie Edwards en unas réplicas de Karen O.Cabe preguntarse, sin embargo, qué tiene de malo sonar parecido a una de las mejores bandas de la década pasada. En compañía del propio guitarrista de los YYYs, Deap Vally recicla la fórmula ganadora de los neoyorquinos, pero desde la soleada costa opuesta. Es rocanrol frontal hecho para desatarse y comandado por un carisma salpicado de diablura. "Femejism" no va a pasar a la historia como un gran acto creativo, pero al menos es merecedor de las comparaciones con la banda original, que, por lo demás, pertenecía a un movimiento tildado de revivalista por la crítica. Algo me dice que Deap Vally serán vistas en el futuro de la misma forma que Kingdom Come, esa banda tan parecida a Led Zeppelin que recibió el apodo Kingdom Clone, pero que, de todos modos, fue capaz de dejar una canción tan notable como What Love Can Be para la posteridad.Hay bastante material en "Femejism", un disco exuberante de aire glamoroso, una cualidad que no tenían los, hasta ahora, mejores discípulos de Yeah Yeah Yeahs, el disuelto y olvidado trío Grand Ole Party. El eco dosmilero rebota con fuerza en Julian , que sería la más retro del álbum si no fuese por el lo-fi acústico de la quejumbrosa Critic , prácticamente el único respiro en un disco que, cuando toma vuelo, puede volverse vertiginoso como Little Baby Beauty Queen o estimulante como las percusiones de Post funk . El mejor aspecto de Deap Vally es con las garras a la vista: en Smile More , hablan desde su posición de mujeres hastiadas de tener que acomodarse a ciertos roles; en Gonnawanna , logran un resultado aplastante tomando lecciones del manual de The Fall. Lo dicho: este dúo no inventa la rueda, pero tiene la picardía para salirse con la suya.Andrés Panes Tags # Please enable JavaScript to view the comments powered by Disqus. Ultimos Contenidos Metal Clásicos Death Martes, 21 de Marzo de 2023 Metal Clásicos Saxon Martes, 21 de Marzo de 2023 Metal Noticias Sorteo: Gana entradas para Sonata Arctica Lunes, 20 de Marzo de 2023 Metal Noticias Undercroft confirma participación en el show de Pestilence Lunes, 20 de Marzo de 2023 Metal Shows Paul Di'Anno: Una demostración de amor al arte Lunes, 20 de Marzo de 2023 Metal Noticias Darker Mysteria se presenta en Bar Óxido Lunes, 20 de Marzo de 2023 Metal Galerias Armagerock VI Lunes, 20 de Marzo de 2023 Metal Shows Mayhem: Armagedón puro y duro Domingo, 19 de Marzo de 2023