Castration to the Priest: Suceso Infernal

5 / 6 de septiembre - Blondie

Santiago - Chile

 

Ante una avalancha de innumerables conciertos de distinta índole, “Castration to the priest” se erige como una alternativa para aquellos cultores del más cruento y blasfemo death metal. Pese al espléndido show que pudimos presenciar ambos días y del evidente arrastre que tiene en nuestras tierras el metal underground, lo anterior, no estuvo exento de las problemáticas que, de vez en cuando, acompañan a los eventos internacionales de metal. El festival se componía de dos días de concierto, cada uno con una parrilla bastante interesante de cuatro agrupaciones, que incluso permitía que los bangers se inclinaran por uno en desmedro de otro según sus intereses. Pero es la ajustada agenda de las bandas que giran por Sudamérica la que a momentos ocasiona problemas de conexiones y trámites migratorios, ya sea visas de trabajo, pasaportes, conexiones fallidas o retrasadas, todo un cúmulo de circunstancias volubles que suceden y que ante los tiempos -casi al límite- con los cuentan las bandas para su transbordos de país en país, pueden verse afectadas sus presentaciones como sucedió esta vez, alterando la programación inicial del festival, más no sus elementos esenciales, pues finalmente se llevó a cabo con las mismas bandas reagendado sus presentaciones. 

 

 

Por todos los problemas logísticos aducidos anteriormente, las bandas Incantation y Uada no se pudieron presentar el día jueves, lo que generaría cierta molestia y caras largas de muchos en las afueras de Blondie, pero un hecho que favoreció a Atomic Aggressor y Vomitory, quienes sumaron shows de larga duración y vaya que finalmente fue una buena elección. Todo comenzó a las 21:00 hrs. con la Blondie atestada de personas y un Atomic Aggressor haciendo lo que mejor sabe hacer, entregar una presentación demoledora que devastó todo a su paso. En un inicio, los asistentes estaban bastante mesurados y tibios en su recepción, hasta que sonó “Unbodied Rites” lo que encendió la caldera que no daría tregua. El mosh y la violencia no cesaron durante todo el concierto que llegaría a su fin con dos clásicos como “The Session” y “Bloody Ceremonial”. 

 

Finalmente, cerraría el accidentado día uno de castración, los clásicos suecos Vomitory, quienes hacían su debut en nuestras tierras, y quienes aniquilaron al público con un sonido sencillamente brillante y demoledor. También debido a su dilatada trayectoria recurrieron a cortes clásicos y más actuales tales como ‘The Voyage’, ‘Possesed’, ‘Regorge in the Morgue’, ‘Flesh Passion’, ‘Chaos Fury’ finalizando con algo más melódico y propio del ADN de su país de origen como ‘Raped in Their Own Blood’.

 

 

Debido a los percances del día uno, se modificó el cronograma del segundo día, dándose inicio a la castración segunda parte a las 17 hrs. del día viernes, horario que imposibilitó la asistencia de muchos bangers a temprana hora. Dentro de ese contexto, Magnanimus valientemente se presenta con una puesta en escena de alto calibre, interpretando temas de su última producción como ‘Raising the Misery Subjugator’ o ‘The Lugubrious Abomination of Torment’, los cuales se alternaban con clásicos de sus primeras producciones como ‘God of cruelty’ u otros más actuales como ‘Delievers the Power to Overthrown the False Prophet’, una banda que ya tiene una trayectoria considerable y que se suma como un plato fuerte de cuanto show de metal extremo existe. Full of Hate, fue una banda que sorprendió, pese a que muchos pensaron que pasaría desapercibida, el apoyo se hizo sentir desde un inicio, sin duda un sonido bien ecléctico, que bordea el grind/death y una vocalización demencial que definitivamente tenía su fiel fanaticada, al igual como lo demostró Rottend Sound, que continúan con la senda anterior, con un sonido más cargado a la rapidez y lo agudo de sus vocalizaciones. 

 

La presentación de Dead Congregation sería de otro nivel, 20 hrs aproximadamente y el infierno se desató, sin lugar a dudas una de las bandas más esperadas por los adictos al putrefacto metal de la muerte y por qué no decirlo, una de las grandes revelaciones del último tiempo dentro del estilo, quienes con tan sólo dos LP de estudio se transformaron ya en un clásico de culto. Se apagaron las luces y comenzó a sonar ‘Martyrdoom’ del espectacular “Graves of the Archangels”, de ahí en adelante el headbanging de los asistentes fue infernal e implacable al vaivén de grandes tracks como ‘Lucid Curse’, ‘Quintessence Maligned’, ‘Vanishing Faith’, ‘Wind's Bane’ o ‘Schisma’ evidenciaban la tremenda presentación del cuarteto griego, un sonido arrollador, cumplieron con las expectativas a cabalidad y el cierre con el tema ‘Teeth into Red’ también de “Graves of the Archangels”, fue sencillamente un trance para todos los presentes, quienes observaban anonadados como recreaban tan fielmente su sonido en vivo, un recuerdo indeleble de la audiencia, que sin duda dará que hablar por mucho tiempo.

 

Luego de tan estruendosa presentación de sus predecesores, sale a escena Uada, quienes ofrecen un entremés entre tanto death metal y grind, las cadentes y alteradas melodías dan como resultado un sonido subterráneo impregnado de toda la magia del underground, voces desgarradas que le dan un toque sencillamente infernal, dando quizá el matiz de black metal necesario, creando una atmosfera siniestra y oscura, que se podía verse de manifiesto en temas como ‘Cult of a Dying Sun’. Una excelente presentación que generaba aun más ansiedad en los presentes para el plato final.  

 

 

Finalmente, la guinda de la torta, fue la presentación de los sempiternos Incantation, una banda que viene merodeando nuestras tierras desde un lejano 1998, son ya más de dos décadas y que en cada visita arremeten como un huracán avasallador. Esta vez darían rienda suelta a un set list especial, con clásicos como ‘Entrantment of Evil’ ‘Devoured Death’. Por otro lado, ‘Lus Sepulcri’ y ‘Ancients Arise’ alternaban hacia algo más actual, aunque gran parte del set fue cargado a lo clásico ‘Unholy Massacre’, ‘Deliverance of Horrific Prophecies’, ‘The Ibex Moon’, “Impending the Diabolical Conquest” y ‘Profanation’, que sería el tema con el que cerraron una extenuante jornada y que, a pesar de los cambios que han sufrido en su alineación, la banda de John McEntee, sigue destellando con ese sonido tan característico extraído de las catacumbas. 

 

 

Siempre resulta injusto referirse a aspectos extra musicales en cualquier festival, sin embargo esta vez debemos destacar la loable jugada de la producción, que mantuvo el line up tal cual como se había estipulado, cambios más cambios menos que evidentemente pudieron haber afectado la programación personal de más de alguien, no obstante la portentosa calidad del festival, limita cualquier atisbo de crítica a un espectáculo bestial y apoteósico como el “Castration to the Priest”, que eleva el estándar para los conciertos de metal extremo, dejando en claro que Chile es y será un potente nicho para el underground más puro y blasfemo.

 

¡Forever Underground!

 

Enzo Marzán / Maximiliano Sánchez

Fotos: Sergio Mella