Nada es real: 50 años de "Sgt. Pepper's Lonely Hearts Club Band" Lunes, 29 de Mayo de 2017 Un repaso por la génesis y un vistazo track por track a un álbum trascendental, que nació dando la espalda al público, y que cambió para siempre la historia de la banda y del mundo entero. Por Nuno Veloso El 4 de marzo de 1966, en el London Evening Standard, apareció un artículo sobre John Lennon escrito por su amiga Maureen Cleave, titulado “¿Cómo vive un Beatle?”. En él, John explicaba su visión de mundo y su perspectiva acerca del estado actual de la religión. Una entrevista interesante pero que, poco después, al ser editada y utilizada fuera de contexto por el fanzine juvenil estadounidense Datebook, justo antes del tour de aquél año por suelo norteamericano, causó revuelo e ira entre los sectores más conservadores del país, quienes solamente recibieron el mensaje de que “los Beatles son más grandes que Jesús”, por supuesto, obviando las palabras más importantes del beatle: “Jesús estaba bien. Son sus seguidores quienes arruinan todo para mí”. El incidente, que terminó con protestas organizadas por grupos religiosos extremos, y quemas públicas de discos, se sumó a la controversia desatada por una de las portadas del álbum “Yesterday And Today”, editado por Capitol. Al sello, acostumbrado a alterar el orden de los elepés originales británicos, incluso creando versiones estéreo falsas, se le envió desde Londres -a insistencia de John y Paul- una fotografía de las sesiones hechas junto a Roger Whitaker, donde los Beatles aparecían en batas blancas, junto a trozos de carne y muñecos desmembrados. Las copias de prueba que alcanzaron a ser producidas, hoy son un ítem de alto valor entre los coleccionistas. “Es tan relevante como Vietnam. Si el público puede aceptar algo tan cruel como la guerra, bien puede aceptar esta portada”, diría Lennon. Para fines de 1966, estos acontecimientos, unidos a la imposibilidad de escucharse a sí mismos en los escenarios debido al griterío de los fans, además del desafortunado incidente en Filipinas, donde un desaire a la primera dama producto de un malentendido terminó con la confiscación de todas las ganancias del show en el país asiático, terminaron por fastidiar completamente al cuarteto, quienes debieron -cada uno por su cuenta- buscar refugio en otras actividades, distanciándose del espectáculo. Así, Lennon viajó, acompañado por Ringo, a actuar en el film “How I Won The War?” de Richard Lester, mientras George buscaba armonía en la India, aprendiendo citar junto a Ravi Shankar y McCartney componía la banda sonora del film “The Family Way”, junto a George Martin. Vivir es fácil con los ojos cerrados Hace cinco meses que Geoff Emerick no veía a los Beatles. El ingeniero de grabación a cargo en “Revolver”, que había deslumbrado a la banda con su inventiva, se encontró con cuatro personajes completamente cambiados. Sus nuevas vestimentas, psicodélicas, complementadas por pelo corto y bigote, eran un cambio abrupto respecto a cómo los había conocido. Recién llegados a Abbey Road para la primera sesión de lo que sería su próximo álbum, Lennon y Paul comenzaron a explicarle a Martin sus intenciones de no salir de gira nunca más. “Revolver”, como una gran revelación, se tornaría en la mecha de la pronta liberación, un escape del público, de las masas, y una puerta a lo desconocido. La creciente complejidad de la música que la banda estaba urdiendo era imposible de recrear en vivo, y la mejor solución era renunciar a las presentaciones de una vez por todas. John trajo consigo una nueva composición, llamada ‘Strawberry Fields Forever’, cuyo nombre provenía de un hogar para niños del Ejército de Salvación, que quedaba al lado de su casa en Liverpool. A pesar de que John ya tenía un demo grabado con la canción, la banda quiso escucharla en guitarra acústica, quedando todos inmediatamente maravillados por su magia y sencillez. Con ganas de afanarse de inmediato en nuevo material, procedieron a trabajar sobre ella y registrar un par de versiones. John, incapaz de decidirse por una, sugirió a George Martin y Geoff Emerick unir ambas. El primero de los nuevos desafíos para el ingeniero había llegado: lograr empalmar dos versiones distintas, en tempo distinto y un semitono de diferencia. En aquél entonces, se requirió de máxima pericia e inventiva para poder ligeramente ralentizar la segunda toma, y apurar la primera, aplicando posteriormente un corte de cinta justo en la entrada del “let me take you down ‘cos I’m going” de la segunda estrofa, a los 60 segundos de comenzado el track. El uso de un mellotron, con sus loops de cintas sonando como flautas al inicio (compuesto e interpretado por Paul), fue otra de las novedades introducidas, junto con el uso de bronces para otorgar mayor peso al sonido, a pedido de John. ‘Penny Lane’, la creación de Paul, estaba inspirada en los logros de los Beach Boys en “Pet Sounds”, y se convirtió en la cara reversa del nuevo single de The Beatles. El lanzamiento del doble cara A, “Strawberry Fields Forever / Penny Lane”, continuando con la estrategia de George Martin y Brian Epstein de editar sencillos para fácil adquisición de los fans, y que estuvieran fuera de los álbumes (para no perder ganancias por ningún lado, además), terminó por desterrar ambas gemas del futuro “Sgt. Pepper’s Lonely Hearts Club Band”. Esperamos que disfruten el show: Track por track 1. 'Sgt Pepper’s Lonely Hearts Club Band' El concepto de Sgt. Pepper’s, presentado como tal por Paul a la banda y al productor George Martin, consistía en emular los nombres bizarros de las bandas de la costa oeste norteamericana (Captain Beefheart & His Magic Band ya había sacado dos singles por A&M Records en 1966), y a la vez, de poner cierta distancia entre la banda y el público. “Le planteé una idea a todos en Londres. ¿Y si hacemos una banda alter-ego, algo como “Sgt. Pepper’s Lonely Hearts”? Estoy haciendo una canción con ese título”, contó Paul en el libro “The Beatles Anthology”. El rockero track de inicio, encargado de materializar sónicamente la imagen de la cubierta elaborada por Peter Blake e introducir a los oyentes al mundo de esta banda ficticia, fue grabado con Paul en la guitarra rítmica y John en el bajo -solo a modo de guía, siendo incorporada la interpretación de Macca al final, quien además rehizo el solo de George a última hora. Mal Evans, el brazo derecho de los Beatles, contribuyó un par de líneas a la canción, y optó por una compensación monetaria en vez de aparecer en los créditos. El uso del nombre Billy Shears -el personaje de Ringo, y único aparte de Sgt. Pepper en finalmente aparecer en escena- responde a la utilización de nombres inmediatamente llamativos, como Eleanor Rigby. 2. 'With a Little Help from My Friends' Con ‘Yellow Submarine’, la vara había quedado alta en lo que a composiciones diseñadas para Ringo se trataba, por lo que el track pensado para él en esta ocasión debía ser mucho más increíble. ‘With A Little Help From My Friends’, grabada casi un mes después de la canción que le precede en el disco, parecía en su letra recoger la personalidad misma del baterista, llegando hasta el día de hoy a ser su más grande logro como vocalista principal en la banda. Co escrita 50/50 entre Paul y John, basada en una idea del bajista, tuvo a todos los miembros alentando a Ringo a alcanzar la nota alta del final, una muestra ejemplar de como todo es posible con ayuda de buenos amigos. 3. 'Lucy in the Sky with Diamonds' Uno de los últimos temas grabados para el álbum, cuando ya llevaban cinco meses de trabajo, marcó controversia una vez que el disco fue editado, debido a la supuesta asociación de sus siglas con el entonces popular LSD. John lo desmintió, asegurando que la inspiración estaba en un dibujo realizado por su hijo Julian, donde su compañera y amiga de escuela Lucy O’Donnell aparecía volando en el cielo, en medio de las estrellas. El resto de la imaginería del psicodélico track, provenía de “Alicia en el país de las maravillas” de Lewis Carroll, uno de los libros predilectos de John y Paul, quien colaboró con las líneas ‘cellophane flowers’ y ‘newspaper taxis’. Reciclando ideas, la guitarra de Harrison en el estribillo fue grabada pasándola por un parlante Leslie -tal como la voz de John en ‘Tomorrow Never Knows’. 4. 'Getting Better' El título ‘Getting Better’ partió como una broma, aludiendo al baterista Jimmy Nicol, reemplazante de Ringo en 1964 mientras éste se encontraba enfermo. Luego de cada presentación con Jimmy, los Beatles solían preguntarle cómo iba todo, a lo que él respondía “It’s getting better” (está mejorando). John y Paul completaron versos a medias, en estilo semi biográfico, hablando acerca de la escuela, maestros rudos y poco comprensivos e incluso violencia intrafamiliar. “Eso de que ‘solía ser cruel con mi mujer, la golpeaba y la apartaba de las cosas que ella amaba’, era yo. Solía ser cruel con mi mujer, y físicamente, con cualquier mujer. ¡Yo era un golpeador! Solía pelearme con todos, hombres y mujeres. Por eso ahora estoy a favor de la paz. Es la gente más violenta la que se vuelca al amor y a la paz”, contó Lennon años después. 5. 'Fixing a Hole' Compuesta por Paul, con ayuda nuevamente de Mal Evans en un par de líneas, fue malinterpretada como una canción sobre la heroína. “Reparar cosas era mi significado. Ser libre para dejar a mi mente vagar, permitirme ser artístico”, diría Macca. Su grabación fue bastante rápida, como en los viejos tiempos, con los cuatro Beatles tocando en directo en la pista base, y un gran solo de guitarra de Harrison. 6. 'She’s Leaving Home' ‘She’s Leaving Home’ marcaba otro gran paso en la obsesión de McCartney por ocupar acompañamiento clásico, una nueva adición a un catálogo que ya contaba con ‘Yesterday’ y ‘Eleanor Rigby’. Estaba inspirada en la historia aparecida en el Daily Mail acerca de Melanie Coe, una joven que se fue de casa -un hogar lleno de comodidades- en busca de libertad (como muchos jóvenes en aquel entonces) y dejó su auto tirado en la calle. Por esas extrañas coincidencias de la vida, Melanie había participado en el programa de televisión británico Ready Steady Go, en 1963, durante la primera presentación de los Beatles, y fue elegida por el mismo Paul como ganadora de un concurso de mímica. 7. 'Being for the Benefit of Mr Kite!' ‘Being For The Benefit Of Mr Kite’, grabada con Paul al bajo, Ringo en batería y George Martin en armonio, estaba inspirada en un poster que John había comprado en una tienda de antigüedades, donde se anunciaba el acto circense de un tal Mr. Kite. “Quiero sentir que estoy en el circo con Mr. Kite y los Henderson”, fue su requerimiento al ingeniero en sonido. La solución llegó de la mano de la experiencia: al igual que en ‘Yellow Submarine’, se recurrió a la biblioteca de sonidos de Abbey Road, esta vez extrayendo muestras de órganos y caliopes, las cuales fueron copiadas y fragmentadas, uniéndose al azar y superponiéndose al final de la canción. Se añadieron otros instrumentos como un órgano cromático, campanas (a velocidad alterada) y armónicas. 8. 'Within You Without You' La primera colaboración de Harrison para el álbum, ‘Only A Northern Song’, terminó siendo dada de baja por su cualidad lánguida y desarmada, siendo reemplazada por ‘Within You Without You’, una idea originalmente en formato acústico y que creció monumentalmente al añadirse multiplicidad de instrumentos de origen indio, llevando la noción de ‘Love You To’ del disco anterior a su expresión más excelsa. El guitarrista, cuya mente se encontraba aún en la India, y estaba todavía afectado por los eventos del año anterior, no había mostrado hasta aquel punto mayor interés en las grabaciones, considerando que el proceso rompía la química de la banda a la que estaba acostumbrado. “Era un proceso de ensamblaje, de grabar algunas partes y después los overdubs. Para mí fue algo cansador y un poco aburrido...yo justo había regresado de la India, y mi corazón estaba allá. Después de todo lo que nos pasó en 1966, todo parecía trabajo duro. Era una pega, algo que yo no tenía ganas de hacer, y perdí el interés en ser un ‘fab’ en ese punto”, dijo en “The Beatles Anthology”. 9. 'When I’m Sixty Four' ‘When I'm Sixty-Four’, compuesta por Paul a los 16 años, era una de las composiciones provenientes de los días de The Cavern. Rescatada para el álbum, se le incorporó un clarinete como acompañamiento, siguiendo la idea original de McCartney de tributar a su padre, quien tocaba trompeta en una banda de jazz cuando él era pequeño. La grabación se aceleró levemente para darle un toque más juvenil, como si el compositor hubiese regresado a los 15 años. “Escribí esa canción pensando que podía ser para un musical o algo. Pensaba que estaba escribiendo una canción para Sinatra, porque habían más discos que me interesaban entonces aparte del rock ‘n’ roll. Nunca hice nada con ella hasta que tuve 24 años, y entonces fue que recién completé la letra”. 10. 'Lovely Rita' ‘Lovely Rita’, inspirada en los Beach Boys, compuesta por Paul y con un cameo de George Martin en el piano honky tonk, fue una de los primeras canciones donde la pista de bajo se grabó al final, una práctica que McCartney emplearía en todo el disco, grabando sus líneas con el amplificador en medio del estudio vacío, y microfoneado a dos metros de distancia, dándole un sonido particularmente redondo y cálido que sobresalía más allá de un instrumento de acompañamiento. “Como las líneas de bajo de Paul eran tan importantes para las canciones de “Sgt. Pepper”, me habitué a meter el bajo al final. En el fondo, esculpía el sonido de bajo alrededor de otros instrumentos, para que se pudiera oír cada matiz”, describe Geoff Emerick en su libro de memorias “Here, There And Everywhere”. 11. 'Good Morning, Good Morning' ‘Good Morning, Good Morning’, de John, se registró rápido y sin complicaciones, debido a su naturaleza más rockera y directa. Inspirada en el anuncio de cereales Kellogg’s y la monotonía de la vida urbana. “John se sentía atrapado en la vida suburbana, y tenía problemas con Cynthia”, relató Paul. A Lennon le llevó un par de semanas decidirse por los overdubs, que terminaron incluyendo sonidos de animales desde elefantes hasta caballos, y una gallina en el momento cúlmine, que pasaría a unirse a la perfección con la guitarra de George en ‘Sgt. Pepper’s Lonely Hearts Club Band (Reprise)’, una canción de último minuto pensada para dar cierta unicidad a un concepto que nunca llegó más allá de los dos primeros cortes. El sonido peculiar de los saxos, se debe a que fueron grabados con los micrófonos en sus campanas, y su sonido reforzado mediante limitadores y efectos como flanging y tracking doble automático. 12. 'A Day in the Life' La primera canción grabada para el nuevo álbum fue ‘A Day In The Life’, una composición de John cuyo título provisorio era ‘In The Life Of’. Presentada a los demás, aunque de forma inacabada, con una guitarra acústica y un acompañamiento de Paul en piano, fue registrada dejando 24 compases vacíos, que posteriormente fueron rellenados con una creación del bajista, sin título, que calzaba perfecto con la naturaleza onírica de la primera sección. Con Harrison en unos bongos casi inaudibles, y Ringo rellenando con sus clásicos redobles, se hizo una versión que aún necesitaba de un elemento clave por definir para poder anudar ambas partes: un sonido que fuera aumentando de a poco hasta llegar al máximo en el momento de entrada de la sección intermedia. La sugerencia de utilizar una orquesta entera para tales propósitos llegó de Paul, la cual se encontró de inmediato con oposición de parte de Martin: el costo era altísimo, e injustificable. Ringo, en broma, sugirió contratar a media orquesta y hacerles tocar dos veces, algo que, finalmente, fue lo acertado. En un tiempo en que las barreras entre lo clásico y lo popular eran inquebrantables, la sesión de grabación fue histórica, al exigirles a músicos profesionales que hicieran una completa improvisación. Para relajar el ambiente, se decidió hacer del evento una fiesta: globos, narices de payaso y sombreros de juguete sería entregados a cada uno de los músicos y los invitados, entre quienes se contaban Mick Jagger, Brian Jones, Marianne Faithfull, Donovan y Graham Nash. El concepto de Paul para el cierre de la pieza, un gran acorde de piano que durase permanentemente, fue concretado por Geoff Emerick, juntando todos los pianos y teclados de Abbey Road, haciendo un triple overdub con la interpretación de todos al unísono. Dejando la ganancia al máximo y subiendo el volumen paulatinamente, era posible alargar el sonido por mucho más tiempo. El puesto de George Harrison, quien aquél día no se presentó a la sesión, fue ocupado por Mal Evans, el asistente todo terreno de los Beatles. Al hacer una de las grabaciones, Ringo hizo rechinar su zapato sin querer al cambiar de posición, lo cual es audible en los segundos finales. Tú sabes que yo sé cuando es un sueño John quiso anexar un pequeño fragmento en ultrasonido para que “los perros también tuviesen algo que oír”, algo que por las limitaciones de los long play no fue reproducible hasta la llegada del compact disc. Junto a aquel detalle, el bizarro loop cerrado de Paul gritando “never could be any other way” (“nunca podrá haber otra manera”) fueron los últimos toques dados por la banda y Emerick a una obra destinada a cambiar el mundo. Habiendo trabajado por primera vez como ingeniero de grabación junto a los Beatles en “Revolver”, la creatividad de Geoff y su ingenio para plasmar las abstractas ideas musicales de los Beatles, le llevaron a ser su más grande aliado para completar sus álbumes más desafiantes. Aunque en 1967, las políticas conservadoras del estudio no permitían a los ingenieros aparecer en los créditos de los álbumes, Geoff obtuvo su primer premio Grammy por su trabajo en el octavo disco de los Fab4. Se trata de un verdadero logro sin precedentes, considerando que la opulencia sónica que destila fue registrada solamente en cuatro pistas. Su segundo Grammy llegaría por su labor en el último álbum de estudio del cuarteto, “Abbey Road”, y el tercero, con “Band On The Run”, el exitoso álbum de Paul McCartney & Wings. “Ciertamente captó la atención. Se lanzó un viernes, y el domingo vimos a Jimi Hendrix abrir su show en el Saville Theatre con ‘Sgt. Pepper’. Ese fue el tributo más grandioso para mí. Yo era un gran fan de Jimi, y él solo había tenido del viernes para aprenderla”, recuerda Macca en “The Beatles Anthology”. Dos meses después de haber salido al mundo, el 27 de agosto de 1967, el manager de la banda, Brian Epstein, fallecía producto de sobredosis de estimulantes. Los Beatles, quienes se encontraban para entonces en la India junto al Maharishi, quedaron devastados. El triste hecho, mermó aún más las entonces quebradizas relaciones entre ellos, evidentes en el disco homónimo de 1968, conocido como “The White Album”, una placa donde la unicidad de la banda fue, ante todo, artificial. La desintegración del grupo, aunque lenta y dolorosa, sería inminente, a pesar de los intentos de McCartney por tomar el timón y sacar adelante más proyectos, como el fracasado film “Magical Mystery Tour” o el turbulento documental “Let It Be”. La portada de Peter Blake es decidora. Funeral anticipado para Epstein, el hombre que les llevó a la cima, “Sgt. Pepper’s Lonely Hearts Club Band” marcó el nacimiento de una nueva era para la música contemporánea, y de un misterioso y mágico viaje sin retorno para los Beatles. Encuentra este contenido en nuestra revista. Tags #The Beatles # TheBeatles # Beatles # Beatles # John Lennon # Paul McCartney # George Harrison # Ringo Starr # George Martin # Geoff Emerick # Mal Evans Please enable JavaScript to view the comments powered by Disqus. Ultimos Contenidos Rock Noticias Solar firma su regreso con 'Los Bailes' Martes, 06 de Junio de 2023 Rock Clásicos Avenged Sevenfold Martes, 06 de Junio de 2023 Rock Noticias TAHIO: nuevo sello tiende puente entre artistas chilenos y argentinos Martes, 06 de Junio de 2023 Rock Clásicos Los Bunkers Martes, 06 de Junio de 2023 Rock Clásicos Queens of the Stone Age Martes, 06 de Junio de 2023 Rock Entrevistas «Rated R»: La química, los mantras y los secretos de un clásico contemporáneo Martes, 06 de Junio de 2023 Rock Clásicos BBS Paranoicos Martes, 06 de Junio de 2023 Rock Clásicos Soft Machine Martes, 06 de Junio de 2023