Violeta Parra

En Argentina

Miércoles, 05 de Febrero de 2014

2014. CHV Música/ Fundación Violeta Parra

Un extraordinario trabajo de rescate patrimonial, es el que ha hecho el sello de Chilevisión junto a la Fundación Violeta Parra. Se trata de una completa re-edición de la obra de la madre de la música de nuestro país, que incluye trece cedés y dos DVD’s, y celebra los 97 años de su natalicio, que se cumplió en octubre. (Violeta nació el 04 de octubre de 1917).

Los álbumes re-editados en hermosos formatos digipack, adornados con cuadros de la propia artista y que suman un total de 222 canciones, son "Cantos Chilenos", "La Cueca", "La Tonada", "Violeta Parra Y Su Guitarra", "Hace Falta Un Guerrillero", "Cantos Campesinos", "Décimas Autobiográficas", "Centésima Del Alma" (interpretado por Tita Parra), "En El Aula Magna De Concepción", "En Argentina", "En Vivo En Ginebra", "Canciones Reencontradas En París", "Obras Para Guitarras", y los DVD´s "Pintora Chilena" y "Bordadora Chilena.

Según relata David Ponce en las notas del disco, “En Argentina” rescata algunos registros primigenios de temas que después serían re-grabados en Francia y editados más tarde en el LP, “Canciones Reencontradas en París”. En ese sentido, las versiones de “Arriba Quemando el Sol” y “Arauco Tiene una Pena”, son tremendas, desgarradas y crudas. Conciencia Social, poesía y genio melódico, reflejando la América profunda, el Chile popular en su estado desnudo.

Aparte de estas canciones primordiales, ejemplos esenciales de su canon musical, el disco exhibe a la Violeta folklorista, que viajaba por el país, buscando melodías, explorando en la poesía popular. En esta faceta del álbum, no solo son notables las interpretaciones de temas de terceros – por ejemplo, “Los Santos Borrachos” o “Que pena siente el alma”-, sino que también, los propios, que muestran la influencia de este rescate, en su propia labor de letrista y compositora: “La mazarromita me dijo a mí”, “A cantarle a los porteños, “Cantaron los pajarito” u otras obligadas: el canto social de Chiloé, “Según el favor del viento” y “Salga la estrella de Venus”.

Como les comentaba, la edición es un arte en sí mismo: La portada es un óleo de Violeta llamado “Blaya en Azul”. Además, contiene fotos, textos de puño y letra de la cantante y las notas, siempre ilustradoras de Ponce. Violeta sabía de su importancia como recopiladora y creadora. Por eso grababa de manera urgente, impulsiva, en los distintos países que visitaba. “En Argentina” es un ejemplo imponente de esto último, un momento único e irrepetible en el camino trágico, pero inmensamente clarividente y adelantado de la artista. Camino que terminó con ese disco genial, referente crucial de la música chilena, llamado “Últimas Composiciones”.

La vanguardia es Violeta Parra, el punk es violeta, la música más visceral que haya escuchado es la de Violeta, la influencia perpetua para la música del futuro es violeta, es Violeta Parra.

Héctor Aravena A.