Dead Cross

2022. Ipecac Recordings

Tras un buen recibimiento a su primer disco homónimo publicado en 2017, el supergrupo encabezado por el multifacético Mike Patton retorna cinco años después con “ll”, segunda entrega que atrae muchas expectativas, esto debido al parón que tuvo que realizar el frontman por su salud mental. La experiencia del vocalista, sumado a la colaboración instrumental de los legendarios Justin Pearson, Michael Crain y Dave Lombardo, nos deja con la ilusión de encontrarnos con un sucesor digno de su primer LP, el cual se destacó por su poderosa vibra de hardcore punk. El álbum fue producido por Ross Robinson y distribuido por la discográfica Ipecac Recordings.

Esta nueva entrega se compone de ocho canciones, contando con una duración total de 32 minutos y 57 segundos de pura agresividad, esencia que caracteriza a la agrupación compuesta por estos connotados artistas. La brutalidad que propone el tracklist no deja tiempo para descansar ni para apreciar detalles, todo lo contrario, es un no parar de fuerza bruta. Su primera canción, ‘Love Without Love”, es un perfecto aperitivo de la tónica que tendrá este trabajo. El caos que transmite es sensacional, más aún con el complemento de unos desenfrenados riffs de guitarras, un prolijo sonido de batería y un coro que eriza la piel. La sinergia del cuarteto nos deja un opener idóneo para la ocasión. Un sonido más lúgubre se presenta en ‘Animal Espionage’, el cual funciona de manera excelente como sucesor del primer track. La grave interpretación vocal de Patton y un hipnotizante riff continuo de guitarra hacen de esta pista una bastante contundente. ‘Heart Reformer’ es una entrega del más puro y clásico hardcore punk. El desenfreno de la base instrumental y la desgarradora performance de voz hacen una poderosa y atrapante sincronía, dejando como resultado uno de los tracks más eufóricos del disco. ‘Strong And Wrong’ es otra pista que posee una fuerza llamativa.

El trabajo que desempeña Michael Crain con la guitarra es, a mi criterio, el más importante, ya que su sonido forma el camino de la melodía de principio a fin. ‘Ants And Dragons’ retoma el hilo de la vibra fúnebre de forma brillante. La técnica aplicada en la interpretación de la batería se lleva toda la atención de los focos. ‘Nightclub Nightmare’ es una exquisita dosis de punk. En temas como este se nota la experiencia y recorrido de cada uno de los artistas involucrados en su creación. Su contagioso coro ayuda a mantener en la retina la canción. Qué decir de su solo de guitarra, simplemente sensacional. ‘Christian Missile Crisis’ mantiene la misma línea del track anterior. Los guturales de Patton funcionan muy bien, dejando en el repertorio una melodía cargada de emociones liberadas frenéticamente. La escalofriante guitarra de ‘Reign of Error’ enganchan automáticamente al oyente. La velocidad de esta pista es maravillosa, dejando como principal característica su capacidad de transmitir energías. El álbum cierra con ‘Imposter Syndrome’. El arranque de este te presenta una suave batería, sonido que termina engañándote, ya que después de eso la banda aplica la estocada final de este disco, plasmando todo lo que ya venían haciendo, sintetizándolo todo en tres minutos.

En síntesis, “ll” de Dead Cross es un álbum completo, pero se queda muy corto de tiempo. Al escucharlo, sin dudas quedas con ganas de más, ya que lo que realizó este supergrupo es espectacular. En comparación a su primer trabajo, en este se ve una clara evolución en la producción sonora y en la interpretación de instrumentos, dejándonos un sonido muy limpio y de excelente calidad. Patton, Pearson, Crain y Lombardo mostraron con muchas creces su jerarquía, dejando como resultado final un disco de hardcore punk de alto estándar.

Carlos Acevedo