Juana Molina: No parar de cerrar Viernes, 15 de Junio de 2018 Jueves 14 de junio de 2018, Club Amanda Cosa rara lo de Juana Molina. Rara como su pop -una de las muchas definiciones a su música. Su primer disco se llama así, de hecho-, pero nunca en plan peyorativo. Su rareza descansa en lo desafiante de su propuesta, su actitud y sus canciones, características muy bienvenidas: las críticas a su discografía van siempre sobre la media. Halo, el más reciente, no es la excepción, una experiencia onírica que trajo a Chile en una llamativa racha: es la tercera vez en menos de un año que pisa la capital. Uno de los motivos de peso para trasladar la cita del Teatro Teletón al Club Amanda (la escasa promoción del evento puede ser otro, además de la polémica en torno al acto de apertura, cuya presencia todavía no se puede explicar), pero la movida resultó de maravillas: en la penumbra de un recinto cerrado, las canciones adquieren más presencia y sus intrincados pasadizos están más a la vista. Lo que me pone muy mal es tocar y sentir que la gente se está aburriendo, comentó la trasandina en una entrevista. Y el riesgo aquí tenía motivos: el show fue casi el mismo de sus anteriores visitas, pero eso no devino en la falta de sorpresa, pues lo que hace Juana Molina sobre el escenario llama a la introspección y la emoción, reacciones cada vez más difíciles de conseguir. Ya con Cosoco se barrió con los problemas de sonido vividos en el Teatro San Ginés. Cara de espejo logró su efecto alucinógeno con el juego de voces y el mensaje del final, críptico y misterioso: Cuando uno sabe que va a verse en el espejo pone la cara que espera ver en el reflejo. Secundada de excelente forma por López de Arcaute y Schwartz, Juana Molina tiene un alcance telúrico y superpone emociones: una canción tristísima como Eras se recibe como una invitación al baile, gracias a ese ritmo en ? que la vuelven irresistible. O como en ese mantra llamado Un día: cerca de 7 minutos de locura sónica y la voz de Molina que se mueve entre la prédica y Violeta Parra -es decir, desde las entrañas-, para luego perderse en su universo propio, al que nos invita saltando, moviéndose sin parar, una puerta abierta -o una liturgia, llámenle como quieran- a la expresión. El riff repetitivo de Sin guía, no es un ejemplo de que las canciones de la bonaerense se encuentran lejos de lo resolutivo. Siempre hay un sonido extra, un arreglo que la desarma o la lleva más allá. Verla sobre el escenario es un pasadizo de emociones que nunca termina, nunca cierra. Jean Parraguez Fotos: Peter Haupt H. Tags # Please enable JavaScript to view the comments powered by Disqus. Ultimos Contenidos Rock Shows Divididos: potencia telúrica directo al corazón Sábado, 27 de Mayo de 2023 Rock Noticias El rock se lució en la Semana de la Educación Artística Viernes, 26 de Mayo de 2023 Rock Noticias Celebramos el regreso de The Mars Volta a Chile con pack imperdible Viernes, 26 de Mayo de 2023 Rock Noticias Royal Blood anuncia su cuarto álbum con el single 'Mountains at Midnight' Viernes, 26 de Mayo de 2023 Rock Noticias Carlos Cabezas estrena video con La Banda del Dolor Viernes, 26 de Mayo de 2023 Rock Clásicos Europe Viernes, 26 de Mayo de 2023 Rock Galerias Kraftwerk Viernes, 26 de Mayo de 2023 Rock Noticias 'Devil in Disguise': Rancid presenta nueva canción Jueves, 25 de Mayo de 2023