Mawiza: el poder de nuestra tierra

Viernes 27 de enero, 2023
Sala RBX

Viernes por la noche y muchos se preparan para una velada en diferentes puntos de la capital. Una variada cartelera de eventos entre los que encontramos fiestas y conciertos es la que tenemos disponible, pero nuestros ojos hoy se enfocan en Mawiza. El conjunto nacional se ha ganado un importante espacio en la escena musical local, consiguiendo una fiel base de seguidores que no se pierden sus shows y lo ocurrido en Sala RBX no fue la excepción.

La jornada comenzó una hora después de lo anunciado originalmente, con una presentación increíble de Nou?s, con un potente sonido con tintes de metal progresivo, djent y metal core. Se nota el constante trabajo de la agrupación por tener un sonido original y atractivo y lo consiguen, sus 3 guitarras rugen, el bajo y la batería hacen que instintivamente tu cuerpo lleve su beat y la voz es clara y desgarradora cuando debe serlo.

Tras un receso y ante un recinto lleno, Txalkan, Awka, Zewü y Karü suben al escenario. Ellos son Mawiza y comienzan su ceremonia con 'Arawkania', su lectura de 'Amazonia' de Gojira, estrenado meses atrás. Los presentes cayeron rendidos a sus pies y coreaban, agitaban sus brazos y cabeza mientras los músicos los deleitaba con 11 composiciones en su mayoría en mapudungún.

Gracias al buen acondicionamiento de la sala, pudimos disfrutar de un excelente sonido e iluminación que, junto a la brutalidad al presentar y tocar sus temas hicieron que disfrutaramos de una gran noche. La energía se transmite a lo largo de la sala mientras la banda interpreta 'Prescindible', 'Kütxal' y 'Mamüll Reke', que es un pequeño adelanto de su próximo disco, muy atmosférico y con mucho enfoque en los sonidos.

El cierre del show fue 'Mawiza Ñi Piwke' una canción perfecta para terminar su concierto hasta una próxima vez que sabemos que nos seguirán sorprendiendo y deleitando con su talento. Si bien todo fue un gran momento, hay algunos destacables que incluyen mucha cercanía con el público, como Zewü tocando en medio de la sala, o Txalkan lanzándose desde el escenario y recibido con mucho cariño por los fans quienes fueron parte de este ritual mapuche. Una jornada redonda que nos demostró el poder del metal y lo importante de nuestras raíces.

Matías Arteaga