Paramore: desenfreno, histeria y adolescencia

Domingo 5 de marzo, 2023
Movistar Arena, Santiago

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Los silencios en la música son necesarios, en especial para las bandas. Entregan ese espacio para descomprimir el aire, llegar con nuevas ideas y tener una mejor visión sobre el futuro. Después de un aclamado y sorpresivo cambio de sonido en "After Laughter" (2017), Paramore se tomó un pequeño receso. En el camino Hayley Williams debutó como solista con "Petals for Armor" (2020), un álbum que trabajó con Taylor York -guitarrista de su banda madre- en la producción y en el que colaboró Zac Farro, su otro compañero de carretera. En esa aventura Williams habló de su depresión y pudo liberarse, después de más de diez años en la industria, de esa obsesión del mundo del espectáculo por mostrar todo como un cuento de hadas. Si en su LP de 2017 predominaban las líneas melódicas alegres, en "This Is Why" (2023) el trío lleva su sonido a un post punk más oscuro y que se alimenta de bandas de los 00s como Bloc Party. Los adolescentes emo ahora son adultos y ven la vida con matices, ya nada es tan blanco o negro. También aparecen en su lírica temas como el calentamiento global y las noticias en la era de las redes sociales. De hecho, Williams salió en escena con una polera en alusión al planeta ("Stop Fucking the Planet").

21.15, Movistar Arena. Después de un juego con linternas de celulares el público se perdió entre gritos para recibir a Paramore. No era para menos, después de casi diez años volvían a pisar Santiago. ‘You first’ fue la elegida para iniciar la fiesta, la que se vio interrumpida por desmayos y personas aplastadas en cancha preferencial. Recurriendo a su carisma, Hayley -algo que haría varias veces- detuvo el concierto para pedir que las personas se tranquilizaran, dieran un paso atrás y por favor respetaran a quien tiene al lado. Según sus palabras, quería asegurarse de que todos pudieran bailar y pasarla bien. La voz de ‘Decode’ estuvo atenta en todo momento a cualquier alarma o grito durante la presentación, para así asegurar la seguridad de sus fans.

 

Sobre el escenario Paramore pasa de tres a siete integrantes y se convierte en una súper banda preparada para lo que sea: demoler todo con una muralla de guitarras en ‘The News’, hacer bailar y saltar a su público con canciones como ‘Told You So’, mostrarse vulnerables en ‘The Only Exception’, jugar con el pop en ‘Still Into You’ y prender fuego al escenario con el pop punk de su clásica ‘Misery Business’. Para darle aún más fuerza y emotividad a la puesta en escena subieron a dos personas para cantar con ellos: Naya y Patricio fueron los elegidos por Williams para cumplir el sueño de todo fan.

Paramore mostró que están en su mejor momento, tanto en ejecución como en dominio del escenario. Ni siquiera los problemas de sonido en sus canciones más rockeras opacó su potencia. Zac Farro entiende su lugar como corazón de la banda con sus golpes fuertes a la batería, Taylor York, llevándolo a un terreno futbolero, cumple la función de un mediocampista tempista que sabe cuándo tomar protagonismo y en qué momento hacer ese importante trabajo silencioso. Williams es una frontwoman carismática, entretenida, espontánea y que desborda energía. Estuvo todo el show corriendo, saltando y bailando, solo durante ‘C’est Comme Ça’ se detuvo. Ahí les pidió a todos que se quedaran quietos para evitar que más gente fuera aplastada o saliera desmayada. Se mostró cercana y les confesó a sus seguidores que el amor más grande que ha tenido es estar en la banda.

Lo de los estadounidenses fue una fiesta total. Ante un repleto Movistar Arena, que agotó entradas en menos de una hora, demostraron su vigencia y ya asoman como un clásico en este revival que está viviendo el emo y sus derivados desde 2020.

Bastián Fernández
Fotos: Thomas Moraga