Ghost: Triumphus Spectaculum

Miércoles 27 de septiembre, 2023
Movistar Arena

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El esperado día finalmente llegó. Tras una larga espera de 7 años, Ghost regresó a Chile para liderar su concierto más grande en tierras nacionales hasta la fecha. Más de 14 mil fieles seguidores se congregaron desde temprano en las afueras del Movistar Arena, llenando cada rincón del Parque O'Higgins.

Las expectativas no eran nada menores. Desde sus inicios, el proyecto ha sido objeto de conversación constante y ha cautivado a una audiencia más joven gracias a sencillos como 'Mary On a Cross' y al intrigante culto creado alrededor. Esto lo ha convertido en una de las bandas más grandes del planeta, manteniendo a todos expectantes ante cada movimiento que hacen en las redes sociales. La noche comenzó con la enérgica actuación de los chilenos Pentagram, quienes, en un corto pero potente set de 5 canciones, demostraron su impresionante trayectoria y talento, siendo elogiados más tarde por Tobias Forge, el líder de Ghost. Anton Reisenegger, después en sus redes, afirmó que Forge le confesó ser un fan de larga data de Pentagram.

La emoción se hizo sentir cuando, cerca de las 21 horas, una gran tela blanca cayó frente al escenario, acompañada de las notas de 'Klara stjärnor' de Jan Johansen y 'Miserere mei, Deus' de Gregorio Allegri, señales inequívocas de que el espectáculo estaba a punto de comenzar. Las luces se apagaron y la introducción oficial del concierto, 'Imperium', resonó en el aire. Los gritos se escucharon de inmediato, creciendo a medida que las primeras notas de 'Kaisarion' llenaron el ambiente. El telón cayó para revelar a los Nameless Ghouls, quienes se acercaron rápidamente al público, transmitiendo una energía contagiosa. Luego hizo su entrada en el escenario Papa Emeritus IV, vestido con una radiante chaqueta dorada, desatando la histeria de la multitud mientras miles de voces se unían para cantar esta canción de su último álbum. La noche continuó con 'Rats' y 'From the Pinnacle to the Pit', una dosis de adrenalina directa que hizo que toda la audiencia saltara al ritmo de la música. "Recuerden cuidarse entre ustedes", exclamó Emeritus antes de entonar 'Spillways'.

 

En 'Cirice' presenciamos el primer cambio de vestuario de Forge, quien lució un atuendo negro con alas, añadiendo un toque de terror a su presencia. No dejó de elogiar a los músicos que lo acompañaron, destacando su virtuosismo, señalando en tono de broma cuando se excedían. 'Ritual', uno de los primeros sencillos de Ghost, fue ovacionado de principio a fin, con la multitud coreando incluso el solo de guitarra final. En 'Call Me Little Sunshine', Emeritus IV deslumbró al público con su traje de Papa azul, dejando a todos asombrados. Luego, en 'Con Clavi Con Dio', fuimos "bendecidos" con mirra antes de dar paso a 'Watcher in the Sky'. La interacción entre los Ghouls y las Ghoulettes no se limitó solo al público, sino también entre ellos, jugando de manera sugerente sobre el escenario.

"Belial, Behemoth, Beelzebub. Asmodeus, Satanas, Lucifer". Un coro monumental se alzó cuando comenzó el clásico 'Year Zero', de su álbum "Infestissumam" (2013). Aquí, presenciamos otro cambio de imagen de Forge, algo que se repitió varias veces durante la noche, junto con llamaradas de fuego que llenaron el escenario al compás de miles de voces que entonaban cada letra de las canciones de Ghost. Era como asistir a una verdadera misa.

Después del interludio acústico de 'Spöksonat', llegó 'He Is', el momento más tranquilo de la noche, iluminado por las luces de los teléfonos celulares de los asistentes. Luego, llegó otro instrumental, 'Miasma', donde pudimos apreciar el "milagro de la resurrección" cuando Papa Nihil regresó para tocar su solo de saxofón. "Mi papa también cantaba... estaba pensado que podíamos tocar una de él", indicó Tobias antes de comenzar con 'Mary On A Cross', la canción que lo catapultó a la fama en TikTok y atrajo a nuevos fanáticos jóvenes. La banda continuó sin pausas con 'Mummy Dust', una de las composiciones más pesadas de su discografía. Antes de cerrar la primera parte del espectáculo, Tobias Forge tomó un momento para agradecer al equipo de seguridad, a Pentagram y a los propios asistentes por acompañarlos y hacerlos sentir bienvenidos. Luego, anunció una "última" canción, y así escuchamos 'Respite on the Spitalfields', que cierra "Impera".

 

El grupo abandonó el escenario mientras la gente pedía más, y finalmente, Forge regresó exclamando: "El show ya terminó, vayan a sus casas", lo que desató otra carcajada en la multitud. Llamó a los Ghouls y nos regalaron tres emocionantes canciones: 'Kiss the Go-Goat', 'Dance Macabre' y 'Square Hammer'. Así, cerramos casi dos horas de un concierto espectacular, que pareció pasar volando y que sin duda quedará grabado en nuestra memoria y oídos durante mucho tiempo.

Ghost ha logrado con maestría una fascinante mezcla de rock, metal y pop, con melodías que abarcan estos géneros y evocan una profunda nostalgia por tiempos pasados. Sus letras potentes basadas en los conceptos de sus discos y la habilidad de sus músicos para ejecutar su papel a la perfección han consolidado su lugar en la escena musical. El "Re Impera Tour" es una prueba clara de que el rock aún está vivo y coleando. Ahora solo nos queda esperar y estar atentos a lo que el futuro de Ghost nos depara. Con solo tres conciertos restantes en este ciclo, nuestros corazones palpitan de emoción ante lo que el destino le tiene preparado a Emeritus IV.

Matias Arteaga
Fotos: Joselyn Heyden