Grimes

Miss Anthropocene

Jueves, 14 de Enero de 2021

4AD. 2020

Tras varios retrasos por problemas personales y tensiones con su sello, la artista canadiense Claire Boucher, más conocida como Grimes, lanzó en 2020 su quinto trabajo de estudio “Miss Anthropocene”, rompiendo con cinco años de ausencia discográfica tras el aclamado “Art Angels” de 2015.

“Todo lo que un artista escupe es arte” dijo alguna vez Kurt Schwitters, pintor dadaísta y surrealista alemán del siglo XX. Y es que Boucher, no solo ha destacado en la industria por su talento musical, sino también porque es de esos personajes que se encargan de que todo lo que tenga que ver con su imagen sea una manifestación artística. Hablar de Grimes, no es solo hablar de música, sino que de un producto que se extiende a la industria de la moda, el diseño y el arte visual.

La canadiense se encarga de todo a la hora de lanzar un nuevo trabajo: compone sus canciones, produce sus álbumes, dirige los videos y diseña sus carátulas. Este último ítem es un tema aparte en su carrera, pues se puede apreciar su evolución como dibujante desde “Geidi Primes” (2010) hasta la fecha, teniendo influencia en ilustradores de mangas como Charles Burns y Daniel Clowes. Es esta libertad creativa la que la ha puesto en constantes tensiones con su sello 4AD y uno de los motivos principales de la demora en la edición de este álbum.

“Miss Anthropocene” se presenta como un álbum conceptual, cuya temática es el fin del mundo debido al calentamiento global, tal como declaró Grimes, desde un “enfoque humorístico”. Pero la verdad es que nada de aquel humor se puede apreciar, pues este es el trabajo más deprimente y desolador de la canadiense hasta la fecha. De hecho, si es que no se explicara en su web que cada track representa un dios con su respectiva temática, difícilmente nos daríamos cuenta del concepto del álbum, ya que al igual que todos sus trabajos, las canciones son tan etéreas y personales que es difícil saber su significado.

El álbum abre con ‘So Heavy I Fell Through the Earth’ y de qué forma: fácilmente uno de los mejores temas de obertura en su carrera, una especie de trance que parece pronosticar la llegada del apocalipsis y una muestra de que su nivel compositivo sigue intacto. La magnética ‘Darkseid’ se encarga de angustiarnos aún más, un track que parece ser una manifestación post apocalíptica de toda la sequía y destrucción que generó el tema anterior. Canciones como ‘My Name Is Dark’ es lo más furioso que Grimes ha mostrado en su carrera y el sarcasmo de su “enfoque humorístico” parece obvio.

Sin embargo, con ‘4AM’ las cosas cambian. Una canción juguetona y rarísima, que combina una atmósfera cyber punk con ritmos tribales a lo Nicola Cruz y finaliza en un drum ‘n’ bass jungle, que está al borde de terminar en el caos total. El trabajo es un cóctel lleno de ingredientes muy concentrados, que mezcla la oscuridad con un pop más limpio. Por ejemplo, si ‘Violence’ mantiene la extraña atmósfera del álbum, ‘IDORU’ es una bellísima canción, cursi e inocente. Incluso, “Miss Anthropocene” sorprende con dos baladas muy introspectivas: ‘New Gods’ y ‘Delete Forever’. Así, Grimes logra una combinación entre los sonidos más oscuros y etéreos de sus primeros trabajos, con la voz pop tan distinguible del “Art Angels”.

Pese a las críticas y al hype que provoca la artista, “Miss Anthropoce” no está ni cerca de ser un tropiezo en la discografía de Grimes, simplemente son las consecuencias de ser una figura tan ecléctica, que ante cada lanzamiento se va poniendo desafíos más altas, que desconciertan a sus seguidores. Que así sea.

Andrés Fuentealba