Jirafa Ardiendo

2003. GMBH

Jirafa Ardiendo, agrupación chilena que ya lleva recorrido un buen camino dentro de la escena nacional, está de regreso con "Persona", su tercer álbum desde que se formaran, por allá por 1995 en La Serena. Se definen a sí mismos como ’rock zoosónico’ y reconocen influencias de los Beatles y R.E.M, combinando los elementos melódicos con algo de fuerza, electrónica y harta exploración sonora... Y eso es lo que encontramos en este largaduración.

De entrada nos topamos con el pop que marca el ritmo de esta placa con ’Mastodonte’, el primer sencillo del álbum que ya suena en las radios nacionales. A continuación nos encontramos con algo de la exploración sónica de la que hablábamos anteriormente, pues en ’Volcán’ la banda nos prepara un viaje por la melodía y los sonidos espaciales, que se matizan con una pizca de guitarra distorsionada, algo que definitivamente nunca debe faltar. Lo que sigue, con ’15.127.1.22.23.12.2012’ y ’Música en Pedazos’ nos devuelve a la extrema calma inicial, con melodías plácidas y delicadas que parecen sumergirte en un verdadero estado de inconciencia... lo que se confirma con el siguientes track, la instrumental ’5,4’.

Hasta el momento, las canciones van por una línea más reposada y suave y, para mi gusto, falta algo de guitarra o más potencia en los distintos instrumentos. Sin embargo, asumiendo el estilo desplegado por Jirafa Ardiendo debemos reconocer que, sin duda, saben lo que hacen y lo desarrollan a un excelente nivel... ¡cuestión de gustos! Así y a modo de ’tapa boca’, el siguiente track, ’Corre’, nos muestra algunas guitarras y ritmos más acelerados que nos sacuden un poco, pero que al escucharlos nos hace comprender porqué el grupo se ciñe más a la línea melodiosa y melancólica... ahí está el fuerte de la banda, pues éste último corte no convence del todo.

Y de inmediato volvemos a la tónica del álbum con ’Sed’, otra delicada pieza que, al igual que ’Oruga’, va ganando intensidad con el transcurso de los minutos y da paso a la excelente y refinada instrumental ’Siempre Así’. ’Vidrio’ y ’Cada’, por su parte, son menos melancólicas y más pop rock, siendo el preludio para uno de los mejores cortes del álbum, ’Masa’, tema donde el grupo demuestra todo su interés exploratorio y, en clave Electrodomésticos, nos entregan un texto casi ininteligible sobre una correcta base de bajo, batería y algo de guitarra.

Hacia el final, el disco remata con las pegajosas y más movidas ’Nuco Rey’ y ’Tarde’, más ’Hiperacusia’, que nos inunda de atmósferas y efectos para darle el corte definitivo a una placa que destaca por su melancolía y delicadeza. Sí, Jirafa Ardiendo sabe jugar con estos elementos y evitar el aburrimiento luego de 20 canciones y más de una hora de música... para mí eso ya es meritorio.

Aquí no hay guitarras distorsionadas al máximo y tal vez se eche de menos un poco más de potencia (gusto personal), pero lo concreto es que sí puedes solazarte de haber escuchado un álbum lleno de musicalidad, sutilezas y arreglos cuidadosamente definidos... Bien por Jirafa Ardiendo.

Rodrigo Carvajal U.