Spiral Vortex

2024. Spiral Vortex

Aunque el rock psicodélico parezca obsoleto (al estar anclado a la cultura y la música de los 60), bandas actuales como Tame Impala lo han podido revitalizar y hacer interesante para las nuevas generaciones, añadiendo diversos elementos de la música actual, sacados de la electrónica o el rave. En el panorama nacional también hay reconocidas propuestas como Astro, Diego Lorenzini o los penquistas de The Polvos! Pero quienes le dieron una vuelta radical a esos sonidos, son Spiral Vortex, con catorce años de trayectoria.

Liderada por los hermanos Sebastián (voz, guitarras) y Maximiliano Aylwin (voz y bajo), han creado un subgénero que bautizaron como "rock psicodélico campestre", compuesto por guitarras imaginativas y secuencias electrónicas que dan como resultado un sonido intuitivo y lisérgico. En los últimos años, han experimentado un crecimiento notable, presentándose con éxito en festivales como Lollapalooza local y el Primavera Sound de Barcelona, además de importantes salas de la capital y en provincias, donde han demostrado gran calidad interpretativa. "Campo Abierto" es su quinto álbum de estudio, siendo el sucesor del celebrado "Prisma" (2020). En 11 canciones, la agrupación combina diversos elementos del rock psicodélico (desde las guitarras de Pink Floyd y los arreglos de teclados de Los Jaivas hasta coros tipo King Crimson), con influencias del ambient y electrónica para crear tanto paisajes sonoros innovadores como dimensiones emotivas. Además, por primera vez la banda se aventura con duetos, contado con la colaboración de los argentinos Natalia Spiner y Benito Cerati.

El álbum abre con 'Campo Abierto', una muestra de cómo han depurado su estilo en el último tiempo, haciéndolo absolutamente más accesible. 'Zodiac', 'Telescopios' y 'Cristalizando', son melodías de ensueño con excelentes armonías vocales, nebulosas de synth y guitarras etéreas. 'Nostalgia' rompe el molde al infundir a la producción una irresistible energía bailable, que incluso hará moverse a los más introvertidos. Por otro lado, 'Existencial' es un tema más terrenal pero no menos luminoso, con las voces de Benito y Sebastián Aylwin deslizándose lentamente sobre un arreglo de guitarras funk y ritmos pegajosos. La participación del argentino resulta especialmente emotiva, ya que los arreglos del tema evocan el estilo de su padre, Gustavo Cerati.

A lo largo del álbum, el grupo demuestra su talento excepcional para crear música que nos resuene profundamente y se nos quede por horas en la cabeza. Así, mientras '1995' y 'Cambios' presentan acordes lentos y frágiles, 'Primera Impresión' se siente como correr por una campiña virtual, pues transmite una extraña sensación de libertad y aventura. 'Moonrave', un instrumental con un majestuoso solo de guitarra sintetizada, suena como si Pink Floyd hubiese hecho la banda sonora de un videojuego. El disco concluye con 'Fin del invierno', una tenue balada acústica, apenas interrumpida por samples robóticos.

Al final, "Campo Abierto"  es una experiencia que invita a sumergirse en sus atractivas melodías y ritmos vibrantes. Con su sonido suave, ritmos irresistibles y encanto nostálgico, "Campo Abierto" no solo dejará una impresión duradera en quien lo escuche, sino que reconfirma a Spiral Vortex como uno de los proyectos más interesantes dentro del indie nacional.

Giordano Antonelli Villavicencio