ECSDLQHP: Cantar hasta no dar más

Sábado, 04 de Agosto de 2018

Viernes 04 de agosto, 2018
Espacio San Diego. Santiago, Chile.

En el fútbol, los hinchas dejan todo por su equipo. No importa si van perdiendo o si están jugando mal, lo importante es nunca dejar de alentar y gritar hasta el último suspiro del partido. En una fría noche santiaguina, El Cómodo Silencio De Los Que Hablan Poco salió de local a presentar Amanda, su segundo álbum. La velada prometía un avasallador show, lo que se cumplió hasta Nota024.m4a, la segunda canción. Problemas técnicos con el amplificador de Franco Perucca (guitarra y voz) pausó por unos minutos el concierto, pero no la música. Wladimir Mella (voz y guitarra), rellenó tocando temas de su cancionero personal, mientras sus seguidores vibraban con cada nota que salía de su guitarra.

Una vez solucionado el contratiempo, la banda siguió con total normalidad su espectáculo, que los asistentes disfrutaron de principio a fin, sin importar algunos errores desde el escenario, ya que cada uno de los tema se convirtió en un karaoke masivo, a tanto llegó la euforia del público que en Chiripa y Nuestro tiempo el piso se movía, parecía que el lugar se venía abajo. Con Zapatillas, finalizó el primer tiempo, que dejó a los fanáticos contentos, pero con la sensación de que pudo ser mejor.

Inició el tramo final, con un cambio en el equipo: sale Amanda entra Run Run. Cigarro en la pieza, marcó un tibio comienzo, en la repasada del disco debut de la banda, pero rápidamente Quiero estar a la mierda mirando al cielo y El viento en la cortina, volvieron a desatar la locura de los presentes, haciéndolos cantar y saltar, al punto que más de un vaso de la barra cayó al piso. El entusiasmo era pleno y no se detuvo hasta que tras la melancólica Jardines, el conjunto anunció Miremos al espacio el último tema de la noche. En el que Franco Perucca, se lanzó con su guitarra al público, generando un descontrol absoluto, que dio paso al fin del concierto, ya que según Wladimir no tenían más temas para tocar.

No fue un perfecto lanzamiento de disco, pero si una jornada en la que los fans de El Cómodo Silencio De Los Que Hablan Poco demostraron que aunque fallen los amplificadores, existan errores de ejecución o no se escuchen los micrófonos, ellos no lo harán porque estarán en las buenas y las malas con el grupo, como fieles hinchas que llenan cada fin de semana el estadio de su equipo.

Bastián Fernández
Fotos: Andrés Borie