Ununiform

2017. !K7

La obsesión de Tricky con la muerte, no tiene nada de mórbido. Para Adrian Thaws, morirse es algo que, aunque sea un hecho biológico irrefutable, no implica necesariamente el fin. “A la gente que he perdido en mi familia, los sigo sintiendo cerca. Me resulta simplemente difícil creer que alguien simplemente se muere, porque he tenido experiencias de ese estilo, mágicas, raras, extrañas”, comentó hace poco a un medio local. Su decimotercer álbum, “Ununiform”, precisamente, parece traer consigo el retorno del misterio, lo ominoso, aquello que inundaba “Maxinquaye”, “Pre-Millennium Tension” y “Angels With Dirty Faces”, sus tres primeros y venerados álbumes editados a mediados de los años 90.

Siempre hábil para escoger a sus vocalistas invitadas -Alison Goldfrapp, años antes de Goldfrapp, aparece en ‘Pumpkin’ de su debut, Björk en el disco bajo el pseudónimo Nearly God, y PJ Harvey en su tercer lanzamiento- está claro que Martina Topley-Bird es aquella que marcó su etapa más ilustre. En la magnífica ‘When We Die’, ella está de vuelta (de la vida de Tricky nunca se fue, es la madre de su hija Mazy, y mantienen contacto permanente) para cerrar un trabajo escalofriante, con un sonido crudo, denso, enclaustrado, donde los raperos Smoky Mo (en la digital ‘Bang Boogie’), Vasiliy Vakulenko (a cargo de las bases en la acústica y friccionada ‘The Only Way’) y Scriptonite, (en la pulsante ‘Same As It Ever Was’ y la melancólica ‘Blood Of My Blood’) representan a Rusia, país donde mitad del disco fue trabajado. 

El resto, hecho en Berlín, donde el ex-Massive Attack vive hace poco más de dos años, cuenta con las colaboraciones de la recurrente Francesca Belmonte (la adictiva ‘New Stole’), Asia Argento (en la simplemente brillante ‘Wait For Signal’), Terra Lopez (en la vertiginosa ‘Armor’), Mina Rose -quien le acompaña en la gira promocional (en el meditativo single ‘Running Wild’ y la rockera ‘Dark Days’), y Avalon Lurks, interpretando un sorpresivo cover de ‘Doll Parts’ de Hole -acá titulado simplemente ‘Doll’. Así, en menos de cuarenta minutos, “Ununiform” captura a la perfección el sonido escurridizo e hipnótico de la mejor época del hombre que fue cabeza del sonido Bristol hace más de veinte años. Este, el primer disco que Tricky edita sin deberle un peso a nadie, suena -por aquella misma razón- relajado, como evidencia nítidamente ‘The Only Way’, su primer single. 

La gran revelación que significó para Thaws enterarse del carácter legendario que su abuelo Hector Thaws tuvo para el Soundsystem de su ciudad en los años sesenta, también repercute en estos trece cortes, donde la reconexión con los verdaderos orígenes de su interés en la música le ha llevado a redescubrir su propio legado, y a no temer parecerse nada más que a sí mismo, sin uniformes. En pleno 2017, cuando el Infierno parece nuevamente estar a la vuelta de la esquina, quien mejor que Tricky Kid, el enigma de voz reptiliana que cree aún en lo extraño del mundo, para tallar con sudor el soundtrack. La tensión del milenio está aquí mismo y los ángeles siguen teniendo su rostro sucio. Tal como siempre fue.

Nuno Veloso

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