Jinjer Wallflowers Viernes, 27 de Agosto de 2021 2021. Napalm Records A estas alturas, el metal (y todos sus derivados) se ha convertido en una suerte de folclor en Europa del este y en los países nórdicos. Los referentes clásicos son inevitables, pero en el último tiempo se ha gestado un nuevo sonido tan propio en esas tierras que su conquista mundial se acerca a pasos agigantados, o ‘colosales’ para entrar en contexto. Los ucranianos Jinjer, con una impecable carrera de poco más de 10 años, se han convertido en un estandarte de esta escena. Los números hablan por sí solos, también su explosivo show en directo, pero más aún su discografía; poderosa, contundente e innovadora. La más reciente placa del cuarteto, “Wallflowers” (2021), llega a coronar este proceso. Puede que sea su apuesta menos riesgosa, mirando en retrospectiva, pero perfectamente compensada con los violentos y pesados riffs que expulsan Tatiana Shmaylyuk y sus compañeros. El reconocimiento ya lo obtuvieron, “Wallflowers'' los viene a consolidar. El primer costalazo lo dan con la intensa “Call Me A Symbol”, una apertura de fuegos dominada por el lado más ‘headbanger’ del cuarteto. Este tema viene a declarar los principios de la placa y nos embarca en un viaje sin retorno por el renovado universo metalero de Jinjer. Sin dar respiro nos embiste “Colossus”, segunda canción del disco, la más corta de las 11 del tracklist, pero no por eso menos efectiva. Aquí la versatilidad de los guturales de Tatiana Shmaylyuk pasan a otro nivel, por momentos una verdadera voz de coloso se apodera de sus cuerdas vocales, para luego devolvernos a un metal más melódico en el coro. Misma fórmula se repite en temas como “Sleeps of the righteous” o “Disclosure!” que combinan poderosos riffs, violentos pasajes instrumentales y melodías frenéticas. Jinjer no dudó en romper las reglas del heavy metal y combinar distintos subgéneros como el groove, el djent, el hardcore o el progresivo en sus canciones. Hasta aquí se va mostrando la tónica general del disco, una montaña rusa de inquietantes y urgentes pasajes que pocas veces dan respiro. “Vortex”, uno de los cortes más “oreja” del álbum, aliviana el viaje y nos permite tomar un poco de aire. Lanzado como sencillo un par de meses antes, muestra otra de las experimentaciones del grupo y nos guía por un mesurado tránsito entre el rock progresivo y el metal, que rememora influencias contemporáneas de grupos como Slipknot. Por otra parte, queda en evidencia el virtuosismo de sus integrantes, el sólido trabajo de Vlad Ulasevich en batería reafirma la academia detrás de Jinjer. “Wallflowers”, canción que le da nombre al álbum, baja otro par de velocidades y nos permite explorar en áreas menos caóticas, pero igual de densas del universo sonoro del cuarteto. El track homónimo, que fue lanzado como último adelanto del álbum, saca a relucir toda la versatilidad de los ucranianos y nos envuelve en un aura tan suave que inquieta, sumado a la enternecedora melodía de su vocalista y los suaves ‘licks’ entrelazados de guitarra y bajo de Roman Ibramkhalilov y Eugene Abdukhanov respectivamente, lo convierten en uno de los highlights del LP. “Wallflowers” toma cierta distancia con su anterior placa “Macro” (2019). Aunque volvieron a trabajar con el productor Max Morton (Stilverlight, Ignea), se nota que pusieron otros límites al momento de experimentar. Antes habían transitado en sonoridades impensadas para un grupo de sus características como el reggae o la electrónica, sin embargo, esta vez situaron al heavy metal como punto de partida y desde ahí fueron explorando. La revisión de influencias metaleras fue transversal: extremos como el thrash se pueden apreciar en canciones como “Mediator” o la furiosa “Copycat”; por su parte encontramos riffs que se inclinan al metal más progresivo en cortes como “Dead Hands feel No Pain” o “As I Boil Ice”. Como era de esperar, Jinjer no defraudó y liberó uno de los álbumes de metal más interesantes del año. Los calificativos no alcanzan para describir la mezcla de estilos e influencias puestas en su sexto largaduración. “Wallflowers” se puede definir como un sube y baja de emociones donde la cantidad de momentos frenéticos y violentos es proporcional a los puntos calmos y melódicos. La multifacética propuesta de los ucranianos hace difícil descifrar por dónde irán en una próxima producción. Lo seguro es que superaron el hype y reafirman su posición como uno de los números más fuertes de la escena de recambio del heavy metal moderno. Oliver Arriola Tags #Jinjer Please enable JavaScript to view the comments powered by Disqus. Ultimos Contenidos Rock Revistas Rockaxis #255 Lunes, 09 de Septiembre de 2024 Rock Shows DIIV: donde la oscuridad y luminosidad se encuentran en armonía Lunes, 09 de Septiembre de 2024 Rock Noticias Mötley Crüe lanzará un box set especial dedicado a ''Dr. Feelgood'' Lunes, 09 de Septiembre de 2024 Rock Entrevistas Alectrofobia: Un portal a nuevos sonidos y exploraciones personales Lunes, 09 de Septiembre de 2024 Rock Noticias Gepe agenda concierto gratuito Lunes, 09 de Septiembre de 2024 Rock Discos David Gilmour Lunes, 09 de Septiembre de 2024 Rock Clásicos John Lennon Lunes, 09 de Septiembre de 2024 Rock Galerias DIIV Lunes, 09 de Septiembre de 2024