Mahavishnu Orchestra

(Publicado originalmente en 2001)

 

1972. Columbia

Sin duda que "Birds Of Fire" es uno de los discos más importantes y populares de la historia discográfica de este grupo. Editado en 1972, esta producción instaló todo una innovación musical dentro de la música de esa época. Banda conformada en ese entonces por John McLaughlin -quien venía de tocar en una de las encarnaciones de la banda de Miles Davis- en guitarra eléctrica , Billy Cobham en batería, Jerry Goodman en violín eléctrico, Jan Hammer en teclados y Rick Laird en bajo eléctrico, fue un icono de lo que puede denominarse como jazz/rock. Mahavishnu es una mixtura musical que extrae el tecnicismo y elegancia del lenjuague jazzístico, toda la fuerza del rock setentero y una búsqueda espiritual del medio oriente. De ahí la importancia de su líder natural y creador de casi todo los temas, John McLaughin, quien tuvo la inteligencia y visión de incorporar escalas orientales y toda una sonoridad que tiene que ver con la expresión musical de ese lado del planeta.

Su forma rítmica es otro de las cualidades más importantes de este disco. "Birds Of Fire", primer tema con que se abre esta expedición auditiva ,es una prueba de ello en su métrica en 12/8, cifra que se aleja a los parámetros convencionales de esos tiempos. Si a esto se le agrega un violín con efectos muy emuladores a una guitarra eléctrica el resultado no pude ser mejor, es decir, nos encontramos con un instrumento que habla con el fraseo clásico del jazz , pero con acompañamiento rítmico del rock y pasajes de funk.

Tema aparte es la ingerencia composicional y de grove musical de su baterista, Billy Cobham, uno de los más destacados en la historia de este bello instrumento. Este interprete crea todo un nuevo enfoque baterístico al incorporar muchas melodías y fraseos rítmicos que se repiten como idea central de los temas. Esta es la base para el resto de las improvisaciones de cada elemento grupal, además de un sonido muy dúctil entre el jazz y utilización del doble pedal en las piezas más fuertes.

Este disco se posesiona como el más importante para los seguidores de este estilo siendo una escuela musical hasta la actualidad. El diálogo musical de todos los integrantes es muy particular, los teclados de Jan Hammer son la cuota de efectos y sonido funk, sumando los solos virtuosos de McLaughlin crean todo una atmósfera muy compleja y a la vez cálida. La crudeza del disco en general se nivela con pequeñas suites de elegancia como: "Hope" y "Thousand Island Park", donde la estructura es más de carácter docto y sólo de instrumentos de cuerda, dualidad muy importante en todo buen disco.

"One Word" es la obra maestra de esta producción, es el desarrollo pleno de todo el trabajo conceptual y de interpretación de cada músico. La guinda es el solo de Cobham al medio del tema donde se cuenta una historia con un antes y un después. El antes es la cálida conversación entre McLaughlin y Goodman que llegan al clímax casi al unísono.

A pesar de similitud con la anterior producción, en este disco se ve un trabajo más acabado y no tan estridente al nivel de propuesta y volumen. Es una de las mejores etapas de esta banda en donde se marca una identidad y proceso de experimentación que fue la base de toda la posterior discografía del grupo con diferentes músicos, pero siempre con el gran maestro John McLaughlin a la cabeza.

Recomendable para los que no lo conocen y para los seguidores más que un clásico un precedente en la historia de la música contemporánea. Un gran ejemplo de la importancia de ser un grupo cohesionado y no un conjunto de virtuosos elementos por separados,a pesar del acabado nivel individual de cada miembro, los interminables solos de cada músico se hacen despertar el goce auditivo de en este intenso viaje a medio oriente

Carlos Gajardo