Nickelback Get Rollin' Martes, 22 de Noviembre de 2022 BMG. 2022 Los amados y odiados Nickelback. Parece que no hay puntos medios al momento de involucrarse con la música de los canadienses. Al menos más allá de sus indiscutibles hits que coparon las listas en los 2000 como ‘How You Remind Me’, ‘Rockstar’ o ‘Photograph’. Ahí no hay mucho problema. El tema es cuando traspasamos esa frontera. Cuando repasamos la abultada discografía del cuarteto y nos damos cuenta de que todo se mantiene prácticamente igual. Este año la banda vuelve con su décimo disco “Get Rollin’”, una producción que los encuentra en un momento de madurez y con un par de hitos para destacar. Como la celebración de sus 25 años de trayectoria y la inducción al salón al Salón de la Fama de la Música Canadiense como parte de los Premios Juno 2023. Un nuevo disco, casi siempre es sinónimo de un nuevo comienzo, de renovar ideas, experimentar, de arriesgarse y por qué no, de hasta cambiar de imagen. Parece que con Nickelback no es el caso. Resulta irrisorio decirlo, pero están prácticamente iguales a como comenzaron. Y no es por falta de talento o herramientas para dar un salto diferente. La voz de Chad Kroeger debe ser una de las más prolíficas y potentes del rock de los 2000 y está sonando tan bien (o mejor) que el primer día. Por su parte, la indestructible base instrumental completada por Ryan Peake en guitarra, Mike Kroeger en el bajo y Daniel Adair en batería está afiatada de una manera demoledora. Sin embargo, el problema del grupo es que siguen empleando la misma fórmula para cada disco. Aunque si hay un par de novedades que sorprenden, se siente como si trataran de replicar los mismos aciertos que han acumulado en 25 años. Comencemos a desglosar. La canción que abre el disco es ‘San Quentin’. Un track en clave metal y hard rock que es una verdadera ametralladora del riffs y doble bombo. La voz de Kroeger desbordando agresividad y el bajo de su hermano Mike marcando el paso de una manera brutal. Nada mal hasta acá. Sin embargo, se siente forzada la fórmula de su hit ‘Burn It To The Ground’ del 2008. Ambas podrían pertenecer al mismo disco y nadie se daría cuenta. En seguida sucede algo similar con ‘Skinny Little Missy’. Aquí el tempo es un poco más pausado, pero con un coro más melódico. Se pueden apreciar influencias del rock moderno como Royal Blood, por la técnica de las guitarras distorsionadas con fuzz y octavador. Hasta aquí un comienzo potente y bastante correcto. El tercer track es la nostálgica ‘Those Days’. Aquí es cuando Nickelback le baja a la distorsión y saca un coro en clave pop/rock para hacer cantar a sus incondicionales fans. En seguida llega ‘Hight Time’, el último sencillo promocional del disco. Aquí los canadienses se la jugaron por explorar influencias del rock de los setenta y ponerlas en esta pegajosa canción. A continuación se retoman los riffs en ‘Vegas Bomb’. Guitarras pesadas y una batería que revienta culminan la colección metalera de esta placa. Una sin demasiadas novedades, pero disfrutable dentro de todo. El track número 6 es el verdadero acierto de este disco. ‘Tidal Wave’ es una gema dentro del repertorio de Nickelback que es muy atípica. La pista juega con sonoridades ligadas al indie rock, una batería con un beat minimalista y certero, y la voz raspada de Kroeger es sacada de su zona de confort y se desenvuelve de manera soberbia en esta canción. Una salida de guion que se agradece y que ojalá repliquen más seguido. 10 de 10 para ‘Tidal Wave’. De aquí en adelante no hay mucho más que lo que ya conocemos. La acústica ‘Does Heaven Even Know You’re Missin?’ es calcada de su hit ‘Photograph’. Por su parte ‘Steel Stills Rust’, con su rock medio country trata de salirse de la norma, pero sin ningún resultado que complazca. En cuanto a ‘Horizon’ y ‘Standing In The Dark’, el mood se llena de optimismo y recurren a las tan manoseadas fórmulas para rellenar de canciones un disco. Para el final sorprenden con ‘Just One More’. Una pista que nos rememora al trabajo de bandas contemporáneas como 1975, con una batería ochentera y guitarras llenas de chorus. Podría quedar en el segundo lugar del podio en esta placa, atrás de ‘Tidal Wave’. En definitiva es un disco parejo, con un sonido de primera y con unas interpretaciones impecables. Ese nunca ha sido un problema para Nickelback en realidad. Siempre han sido geniales músicos. Sin embargo, a una banda de su categoría y trayectoria se le pide algo más. Un poco más de riesgo y sorpresa. Algo para escuchar donde sepamos que se les hizo cuesta arriba y aun así salieron airosos. Si hay un tema que podemos rescatar es la ya nombrada ‘Tidal Wave’. Ese tema suena a dedicación y a que salieron de su zona para experimentar algo distinto. Por más canciones como esas y por menos fórmulas repetidas. Oliver Arriola Riquelme Tags #Nickelback #Get Rollin' #Chad Kroeger Please enable JavaScript to view the comments powered by Disqus. Ultimos Contenidos Rock Noticias Concurso cerrado: Los Jaivas en la Quinta Vergara Viernes, 08 de Diciembre de 2023 Rock Noticias Sebastian Bach libera su primer single en 10 años Jueves, 07 de Diciembre de 2023 Rock Noticias Concurso cerrado: Bunbury vuelve a Chile Jueves, 07 de Diciembre de 2023 Rock Noticias Damon Albarn asegura que la reunión de Blur se terminó Jueves, 07 de Diciembre de 2023 Rock Noticias Green Day habla de lo personal en nuevo single Jueves, 07 de Diciembre de 2023 Rock Noticias The Ghost Inside anuncia su debut en Chile Jueves, 07 de Diciembre de 2023 Rock Noticias Concurso cerrado: You Me at Six debuta en Chile Jueves, 07 de Diciembre de 2023 Rock Noticias Concurso: No Fun at All + Ignite en Chile Miércoles, 06 de Diciembre de 2023