Los 100 discos de la década 2010-2019: Parte III

Rammstein, PJ Harvey, The Black Keys, Alice in Chains, Opeth y más

Martes, 02 de Junio de 2020

Los 100 discos de la d�cada 2010-2019: Parte III

Continuamos revisando nuestra lista con los 100 mejores discos de la década 2010-2019.

En esta tercera tanda, el equipo Rockaxis destaca varias obras, desde Rammstein a PJ Harvey, pasando por The Black Keys, Megadeth, Opeth y Rama.

Escriben en este especial: Juan Pablo Andrews (J.P.A.), Pablo Cerda (P.C.), Bastián Fernández (B.F.), Emilio Garrido (E.G.), Felipe Godoy (F.G.), Luciano González (L.G.), Jean Parraguez (J.P.), Cristofer Rodríguez (C.R.), Fernanda Schell (F.S.) y César Tudela (C.T.).

A continuación, la selección entre los puestos 60 y 41.

Revisa la parte I aquí.
Revisa la parte II aquí.
Revisa la parte IV aquí.
Revisa la parte V aquí.
Revisa la parte VI aquí.

60. "Sound & Color" (Alabama Shakes, 2015)
Un buen disco para los conocedores del género. “Sound & Color” demuestra una mezcla de funk, blues, soul y rock pero revitalizados al presente, acompañados por la dulce y portentosa voz de Brittany Howard, formando un característico y original proyecto. Ella le otorga el sello y rompe la monotonía instrumental. Un disco que es el fruto de impulsos creativos e instintos que provocaron una obra llena de talento que invitan a escuchar e hipnotizarse con él de principio a fin. (F.S.)

59. "Pressure & Time" (Rival Sons, 2011)
Rocanrol puro. Rival Sons se la jugó con nuevos sonidos y lo logró. Con fusiones influenciadas por clásicas bandas de rock, crearon un disco que trae toda la energía y potencia de los 70, además de toques vintages que exponen un sonido sensacional. A través de cada canción, la agrupación se vuelve sólida y comienza a evolucionar. (F.S.)

58. "The Assassination of Julius Caesar" (Ulver, 2017)
Con un álbum elegante, sombrío y misterioso, los noruegos siguieron flexibilizando su sonido a millones de años luz de ese black metal que los vio nacer en los 90. Mirando siempre hacia adelante, Ulver exudó sensualidad electrónica en su décimo tercer disco de estudio y se movió con destreza entre el synth pop, la electrónica y el dark ambient para entregar piezas más tangibles que en sus etéreas aventuras pasadas. Sin sonar a refrito ochentero, los liderados por Kristoffer Rygg equilibraron los valores de esa época para instalarlos con gracia en el siglo XXI. (P.C.)

57. "Let England Shake" (PJ Harvey, 2011)
A la altura de su octavo álbum, la máxima en la carrera de Polly Jean Harvey era la misma: nunca sonará a su anterior trabajo. Tras el lúgubre “White Chalk” (2007), la inglesa mira hacia a su país y la pésima gestión del gobierno en el plano internacional. Ante todo, “Let England Shake” es un trabajo político. Desprecia la indolencia de la casta gobernante ante los conflictos bélicos, pero con una intensidad que ya conocemos. PJ compone desde las entrañas e interpreta sus canciones con una severidad que solo podemos encontrar en su obra. Fantástica y sobresaliente. Una vez más. (J.P.)

56. "lullaby and… The Ceaseless Roar" (Robert Plant & The Sensational Space Shifters, 2014)
Después de una carrera donde los éxitos artísticos son mayores que los traspiés, ¿es posible seguir sorprendiendo? La respuesta es sí. Al volver escuchar el excelente disco que Robert Plant lanzó hace seis años. La apuesta era riesgosa: focalizar –en su mayoría– los esfuerzos en ese vilipendiado género llamado world music; sin embargo, la experiencia resultó exitosa, con inspiración en las letras y música, donde destacan grandes composiciones como ‘Rainbow’ y ‘Turn It up’. (E.G.)

55. "Rammstein" (Rammstein, 2019)
La transgresión es parte del sello de Rammstein, tanto musical como visualmente. Tras diez años de espera, su trabajo homónimo sigue esa misma línea, siempre agresiva y frontal, tomando todos esos elementos que los convirtieron en íconos y plasmándolos en un disco que, al igual que sucedió con otros, sigue sonando como algo más que idóneo para la época. Contundente y cuidadosamente creado, el álbum deja claro que tomarse el tiempo para una creación no es en vano. (L.G.)

54. "The Suburbs" (Arcade Fire, 2010)
Una oda a la vida, por las cosas buenas, las malas y las que son simplemente horribles. Lo necesario que es romper la burbuja, mirarse a uno mismo y sentirse orgulloso de lo que eres, a pesar de que no todo salió como esperabas. “The Suburbs” es desgarradoramente sincero, es el momento en que Arcade Fire decide mirar quienes son y comentarle al mundo que ser el raro de la sala no es nada malo y que no se debe sentir vergüenza por ello. Los pianos y las atmosferas ,como siempre, están bien cuidadas y tratadas con la delicadeza que caracteriza a la banda. El bajo de ‘Ready to start’ eriza la piel. (B.F.)

53. "Se caiga el cielo" (Electrodomésticos, 2013)
No es pretencioso citar a “Se Caiga el Cielo” como una de las obras nacionales más impactantes de la década. Mostrando una madurez como trío y, lo más importante, sin recurrir a lugares comunes de su propio pasado, Electrodomésticos despachó un disco que resiste el paso del tiempo con un sonido oscuro, por momentos brillante, y que los posicionó con éxito en la escena actual, contemplando diversos shows en vivo que demostraron que ahí está la esencia de la banda. Además, incluye una de las mejores canciones que ha escrito Carlos Cabezas en su carrera: ‘Detrás del alma’. (E.G.)

52. "Rainier Fog" (Alice in Chains, 2018)
Pareciera que la inspiración de este grupo no tiene fin. El hasta ahora último disco de Alice in Chains es otra obra llena de buenas canciones, como ‘The one you know’, ‘Drone’, ‘Never fade’ y ‘All I am’. Muchas de ellas recuerdan su época dorada con el gran Layne Staley. Es probable que el cuarteto sea el conjunto con la carrera más pareja de todos los salidos de Seattle. ¿Hay algún disco malo de Alice In Chains? (J.P.A.)

51. "Brothers" (The Black Keys, 2010)
Un disco imperdible dentro de la trayectoria de The Black Keys. En su sexta entrega, aún mantienen vivo el fuego del garage y el blues rock en cada canción, donde van evolucionando y mostrando sus destrezas y vitalidad a través de sus melodías. Esta producción conjunta entre la banda y su socio Danger Mouse demuestra cómo realizar una gran obra con tan solo dos talentosos y versátiles músicos –Dan Auerbach y Patrick Carney– a cargo de todo. (F.S.)

50. "Spark" (Alain Johannes, 2010)
“Spark” es más que el primer disco solista de Alain Johannes: es la primera piedra de un lacerante plan de sobrevivencia con salmos para exorcizar el dolor más profundo que ha vivido: la pérdida de su compañera Natasha Schneider. Acá, las canciones son la encarnación musical de su duelo y la banda sonora de su retorno a Chile –su tierra natal–, con letras impregnadas de tristeza que son un viaje a corazón abierto por sus sentimientos más profundos. (C.T.)

49. "Imposible" (Rama, 2013)
Cuando los primeros segundos de un álbum son definitivos para querer quedarse. Eso es el riff de guitarra de ‘Imposible’, el primer track del disco. Algunas de las bases instrumentales con más peso de la generación actual del rock chileno tienen protagonismo aquí, como las machacantes ‘Untitled 01’ y ‘Ecos’, aunque sin renunciar a los matices icónicos del repertorio de la banda, como en ‘La señal’ y ‘Cuantos somos’, ejercicios emotivos, conglomerantes y viscerales, que recuerdan la faceta más melódica de Soundgarden o los mejores singles del rock alternativo norteamericano moderno. (C.R.)

48. "The Satanist" (Behemoth, 2014)
Adentrándose aún más en la vasta oscuridad, Behemoth fueron los responsables de uno de los álbumes de metal más importantes del 2014. Esto se logró a través de canciones dinámicas que los llevaron por terrenos inexplorados y siniestros, enganchando con una brutalidad que pocas veces les habíamos escuchado a los liderados por Nergal. Fundamental para el pesado estilo en una época en que no siempre lo novedoso resulta tan triunfante tanto para sus creadores como para los fans. (L.G.)

47. "Heritage" (Opeth, 2011)
A veces, los cambios pueden ser más dolorosos para los receptores que para los ejecutores. La metamorfosis del grupo liderado por Mikael Åkerfeldt fue uno de los temas más comentados de la década, con una décima placa que trazó la línea para cerrar la puerta a los guturales, a la velocidad descarnada y a las explosiones rabiosas. Tras “Heritage”, todo cambió en el mundo de Opeth y su viraje sería el impulso que Åkerfeldt ansiaba desesperadamente para no caer en la rutina. Una búsqueda de futuro con elementos del pasado. (P.C.)

46. "Worship Music" (Anthrax, 2011)
Años habían pasado desde su álbum anterior, así como también más de un vocalista. Finalmente, tras años de rumores, el emblemático Joey Belladonna volvía a darle voz a los neoyorquinos, marcando su regreso con un álbum que tuvo la valentía de no tributar los 80, prefiriendo hacer un thrash con matices, melodías y derechamente moderno. Ese sello con que se posicionaron en su momento sigue ahí, pero esta vez, es llevado por rumbos que reflejan un considerable avance musical. (L.G.)

45. "NEW" (Paul McCartney, 2013)
Si bien la carrera de McCartney durante los 2000 se ha mantenido casi ininterrumpida, desde el impecable “Chaos and Creation in the Backyard” (2005) que no lanzaba una obra que mostrara a cabalidad su vigencia, con frescura y vitalidad. Ese momento llegó en 2013 con “New”, una obra en que quedó en evidencia –nuevamente– la cohesión y complicidad con la banda que lo ha acompañado en los últimos años, incluyendo canciones que, a estas alturas, ya se han transformado en clásicos de su discografía e infaltables en sus espectáculos, como ‘Save us’ y ‘Queenie eye’ (canción que debe traer malos recuerdos al presidente). (E.G.)

44. "A Deeper Understanding" (The War on Drugs, 2017)
Un viaje al interior, explorando las heridas más profundas pero con algo de optimismo, mientras un sintetizador de los 70 hace de guía espiritual y también como esa luz que ilumina el camino. “A Deeper Understanding” es un álbum que se toma el tiempo de construir escenas y ambientes que permiten entender la depresión por la que atravesaba Adam Granduciel (vocalista y compositor de la banda), la que entrega en forma de canciones melancólicas llenas de detalles, como arreglos de guitarras y delays sutiles que van a adornado, todo bajo la supervisión del mismo compositor quien decidió hacer todo solo y en soledad. (B.F.)

43. "San Sebastián" (Fernando Milagros, 2011)
Un golpe a la escena musical chilena de comienzos de década. Primero, porque actualizó el repertorio de la generación folk. Mientras sus contemporáneos miraban a los sintetizadores para redefinir sus horizontes musicales, Milagros eligió un sonido de autor más rockero, orgánico y desnudo. Segundo, porque colgó en las radios un número importante de canciones para un artista independiente, trayendo de vuelta el tradicional formato de canción pop rock al dial, con singles como ‘Piedra angular’, ‘Nahual’ y la exitosa ‘Carnaval’, en dueto con Christina Rosenvinge. (C.R.)

42. "The Devil Put Dinosaurs Here" (Alice in Chains, 2013)
El segundo disco con William DuVall en la voz principal, tras la trágica muerte de Layne Staley. La armonía de las voces dobladas y los riffs endemoniados de Jerry Cantrell lucen como si este conjunto nunca se hubiese detenido. Si bien con “Black Gives Way to Blue” (2009), su predecesor, dijeron estar aún presentes, con este manifestaron que el legado creativo continúa de buena forma. (J.P.A.)

41. "Dystopia" (Megadeth, 2016)
El inicio de "Dystopia" es una tromba asesina. ‘The threat is real’, ‘Dystopia’ y ‘Fatal illusion’ son bombas en la cara. Para este disco, Dave Mustaine cuenta con Chris Adler (Lamb of God) en batería y Kiko Loureiro (Angra) en guitarra, lo que otorga nuevos y buenos aires. Pese a que en ciertas partes tiende a decaer, es un gran disco. (J.P.A.)