Rammstein Rammstein Jueves, 23 de Mayo de 2019 2019. Universal Una portada completamente blanca y sumamente minimalista, donde sólo basta la presencia de un fósforo para incendiar el mundo y reducir a cenizas los diez años de interminable espera desde “Liebe Ist Für Alle Da” (2009). Once nuevas canciones reunidas en un disco homónimo. Con su estética inconfundible y con una propuesta artística integral y visualmente aplastante, Rammstein está de vuelta para retomar su sitial como una de las bandas líderes del rock actual y lo hacen con un disco que se abre a nuevas sonoridades, texturas y colores, logrando sonar novedosos, distintos y renovados, pero siempre sin perder un ápice de su extravagante y genial ADN sonoro. En el aspecto lírico, el grupo o mejor dicho el cantante Till Lindemann (responsable de todas la letras), sigue escupiendo desde las entrañas una verborragia visceral, ácida y brutalmente crítica con canciones que hablan sobre temas como la historia de Alemania, la iglesia, el voyerismo, la pedofilia, el sexo, la prostitución, y el amor en sus aristas más oscuras y perversas. Por primera vez el productor de todos sus discos Jacob Hellner queda fuera de la ecuación y su labor ha sido realizada por Olsen Involtini, habitual colaborador del guitarrista Richard Z. Kruspe en su proyecto Emigrate. En ese sentido, con un sonido enorme y envolvente, con una gran calidad aural y espectral, el disco no tiene una producción lineal, sino que cada canción tiene un tratamiento especial para resaltar los elementos distintivos en cada una de ellas, donde destaca además la utilización de la orquesta y coro sinfónico de Bielorrusia en un par de temas. El inicio es con la ya conocida e impactante ‘Deutschland’, la que arranca con un sonido de teclado urgente e incisivo para luego incorporar unos acordes abiertos de guitarras dobladas, redobles marciales de batería y explotar sónicamente en un himno instantáneo de Rammstein. La maquinaria está perfectamente ajustada y en marcha para aplastar todo a su paso y para ello la banda desarrolló una película de 10 minutos de duración donde nos muestran más de dos milenios de la historia germana con su grandes logros, pero también con sus más oscuras miserias. Una pieza audiovisual de un nivel artístico superlativo, con una dirección de arte maravillosa, con una estética y un nivel de detalles históricos abrumadores y siempre haciendo un extraordinario uso semiológico de las imágenes con un alto impacto, con múltiples lecturas, con un polémico nivel de provocación y cruzando líneas prohibidas que ninguna otra banda se atreve a traspasar, por todo eso y más, Rammstein es un estamento artístico fundamental del siglo XXI y más de 100 millones de visualizaciones del video en todas las plataformas de streaming, dejaron constancia que una década sin nueva música es demasiado tiempo para una banda de esta categoría y relevancia. Tras reponerse del impacto inicial, la siguiente es ‘Radio’, el otro single de adelanto y otro video notable, que esta vez nos muestra como la radio jugó un papel importantísimo en la historia de Alemania, tanto para bien como para mal, ya que durante la época de la guerra fría y del Muro de Berlín la gente de la RDA (de donde Rammstein son originarios), utilizaba las radios de onda corta para poder saber que pasaba en el mundo occidental y tenían al menos esa compañía con música y noticas un par de horas al día; pero también la radio fue usada como eje de comunicaciones para difundir la doctrina nazi de Hitler y esa ambivalencia se ve claramente en el video, el que tampoco estuvo exento de polémica, siempre con un tratamiento estético y artístico impresionante y es que la parte visual y cinematográfica de la banda ha sido un ingrediente primordial en la propuesta de Rammstein e incluso antes de lanzar su primer disco “Herzeleid” (1995), ya se habían contactado con el cineasta de culto David Lynch intentado que dirigiera uno de sus videos. Musicalmente la canción es otro clásico de Rammstein en su tradición más pura, con un sonido masivo y con enérgicos ritmos gancheros donde hay un pequeño guiño a Depeche Mode en el profuso uso de teclados análogos por parte del Doktor Christian Lorenz, pero también a Kraftwerk, pioneros en la fusión de la música electrónica con el rock. Un impactante coro de iglesia introduce ‘Zeig Dich’ donde los gruesos muros de guitarra de Richard Z. Kruspe y Paul Landers toman el protagonismo. La voz grave y cavernosa de Till Lindemann resuena con potencia acoplándose a la perfección con la irrupción coral que vuelve a tener presencia a partir de la medianía del tema, en otra pieza de artillería pesada y contundente que seguramente tendrá un lugar destacado en la inminente gira por estadios que recorrerá Europa con una nueva y aplastante producción escénica y es que en la actualidad no hay otra experiencia de rock en vivo que pueda superar lo que los alemanes ponen sobre el escenario, hay que estar ahí y vivirlo al menos una vez en la vida, y el hecho de que la gira tenga todas las entadas agotadas desde diciembre pasado, es una prueba irrefutable de lo anterior. En ‘Ausländer’ la banda nos invita a una fiesta y fusionan la música rave con el rock y el metal para recordarnos que fueron ellos y no Ghost los pioneros del “metal bailable”. El bajista Olivier Riedel y el baterista Christoph Doom Schneider elaboran una sensacional base rítmica sobre la que Lindemann va utilizando palabras en francés, italiano, inglés y español mezcladas con el alemán y con el apoyo de una juvenil voz femenina en el coro, como ya lo han hecho antes. Luego llega la festiva pero contundente ‘Sex’ de la que seguro también habrá un video de presentación (la banda filmó 5 videos antes del lanzamiento). Al principio tiene una parte rítmica que puede recordar al ‘Personal Jesus’ de Depeche Mode pero luego explota en un combo de puro metal industrial que nos retrotrae a los momentos más inspirados de Marilyn Manson y Rob Zombie de hace 15 años atrás. ‘Puppe’ es una pieza oscura, algo melancólica al inicio para luego dar curso a una parte realmente intensa con quizás las voces más desgarradoras que ha hecho Till Lindemann, con unos teclados in crescendo que acentúan la dureza instrumental del tema, en una pieza muy interesante y que con cada escucha va entregando nuevas sensaciones. ‘Was Ich Liebe’ arranca pausada y sigilosa, en un tema lleno de sinuosas cadencias en el bajo de Riedel, para desembocar en un hímnico medio tiempo plenamente Rammstein, combinando sutilezas como delicadas guitarras acústicas, con una base bien pesada. ‘Diamant’ es el momento más intimista del disco, una balada lúgubre solo con la voz de Till Lindemann y el arrope de una guitarra acústica y unos violines. Introspectiva, reflexiva, etérea, desnuda; solo una banda como Rammstein logra transmitir tanta belleza sónica en una pieza tan minimalista y de tan corta duración, pues la canción solo se extiende por dos minutos y medio. Un reverberante teclado Hammond B3 destaca en ‘Weit Weg’, haciendo imposible no pensar en Deep Purple sabiendo que el maestro Jon Lord popularizó ese instrumento en el rock, y acá en manos del Doktor Lorenz conduce otro soberbio medio tiempo, bastante experimental pero de gratificantes y seductores resultados. ‘Tattoo’ retoma el filo de las guitarras y el peso de la base rítmica para entregarnos otra pieza de artillería clásica de Rammstein. Puro metal industrial marca de la casa que califica para ser un número puesto en vivo pero también para tener un video clip y me la juego por ello, porque es un tema tremendo. El cierre llega con la hipnótica ‘Hallomann’ la que se desarrolla bajo un punzante bajo inicial de Riedel para dar paso a esos temas típicos de Rammstein donde los instrumentos poco a poco van agregando más matices sonoros a la canción para llegar al momento del coro y explotar con toda una fastuosa instrumentación y un bello coro femenino cortesía de la vocalista Carla Bruhn. Rammstein ha germinado un séptimo trabajo mucho menos hermético que sus obras previas; es marcial, es industrial, es metalero, es bailable, es experimental, es electrónico; es todo eso y mucho más, porque el grupo tiene una personalidad y una identidad musical tan fuerte que si algún día deciden componer un tango o una pieza de flamenco, siempre seguirá sonando inequívocamente a Rammstein y este álbum de regreso es una prueba fehaciente de que no existe ninguna tecla que ellos no puedan tocar, por la sencilla razón que no son una banda que sigue tendencias, simplemente las imponen. Cristián Pavez Tags #Rammstein # Rammstein # Till Lindemann # Olsen Involtini # Richard Kruspe # Paul Landers Please enable JavaScript to view the comments powered by Disqus. Ultimos Contenidos Rock Discos Ringo Starr Miércoles, 22 de Enero de 2025 Rock Noticias 'Even If It Kills Me': Papa Roach lanza nuevo single Miércoles, 22 de Enero de 2025 Rock Noticias Con sets distintos: Eterna Inocencia llega a Sala Metrónomo con dos conciertos Miércoles, 22 de Enero de 2025 Rock Noticias Foster the People y Turf se suman a los sideshows Lollapalooza Chile Martes, 21 de Enero de 2025 Rock Noticias Clap Your Hands Say Yeah vuelve a Chile celebrando su álbum debut Martes, 21 de Enero de 2025 Rock Noticias Los Jaivas recorrerán Chile en formato acústico Martes, 21 de Enero de 2025 Rock Articulos Pink Floyd: «Animals» remezclado para las masas (oprimidas) Martes, 21 de Enero de 2025 Rock Noticias Inhaler publica nuevo single: 'A Question of You' Martes, 21 de Enero de 2025