Shame Drunk Tank Pink Jueves, 11 de Marzo de 2021 2021. Dead Oceans La prensa inglesa - en especial New Music Express - tiene la costumbre de buscar todos los años a la nueva banda que salvará al rock. A estas alturas es casi una tradición. Ese cartel recibió Shame con su alabado “Song Of Praises” en 2018. Recién salidos de la secundaria y con rasgos de pubertad en sus rostros, tomaron la carretera para mostrar lo que saben hacer. Les fue bien: defendieron con éxito su primer LP; dieron la vuelta al mundo; y llamaron la atención por su energético show en vivo, rasgo que comparten con la nueva camada de grupos post punk y punk de la isla. Pero les quedaba sortear el mayor desafío: su segundo álbum. Era hora de probar si eran una de las tantas bandas alzadas por los medios o hay que poner las fichas en ellos. Los cinco amigos de South London fueron inteligentes y reclutaron a James Ford, el compinche favorito de Arctic Monkeys en las perillas. Se fueron a Francia, y a base de un buen vino, le dieron sansón a las canciones que creó Charlie Steen (vocalista) en su pieza. El resultado es un álbum sencillamente brutal. Un bombazo. De entrada atacan con una muralla de guitarras con la contagiosa ‘Alphabet’, dejando en claro que lo de ellos es enserio. Luego en ‘Nigel Hitter,’ sacan a relucir su amor por Talking Heads, Iggy Pop y las canciones que invitan a bailar, uno de los ingredientes nuevos que suman a su post punk rabioso. Pero es en ‘Born In Luton’ y ‘Station Wagon’ en las que se siente el crecimiento de Shame. Steen saca a relucir la habilidad que tiene para traspasar emociones. Logró controlar su voz, tanto para gritar como susurrar. Le crees totalmente lo que dice. Sus compañeros de banda tampoco se quedaron atrás y en su ejecución dan cuenta de cómo se pulieron tocando en vivo. Funcionan de maravilla. Saben cuándo callarse, en qué momento acelerar y aprendieron a crear atmósferas, las que son parte importante de su propuesta en “Drunk Tank Pink”. En 11 canciones, los ingleses muestran que lo suyo no fue mera casualidad y que son uno de los nombres más interesantes del rock alternativo. Su segundo álbum no tiene desperdicio. Es audaz, atrevido y líricamente bien dotado. Prueba de ello es ‘Human, for a minute’, una canción que, en palabras de Steen, justifica su apego a una relación tóxica. La gran clave en este trabajo está justamente ahí : en la sinceridad. La banda no tuvo miedo a mostrar sus claros y oscuros. Optaron por reflejar quienes son sin importar lo que piense el resto. Algo absolutamente valorable en estos tiempos de redes sociales. A sus en promedio 23 años, el quinteto inglés que se autodefine como “outsiders”, firmó su pase a la primera división, saliendo campeón y jugando bien. Solo el tiempo dirá si logran mantenerse y quedarse en las primeras posiciones, aunque todo parece indicar que lo podrán hacer sin problemas. Bastián Fernández Tags #Shame # Drunk Tank Pink # James Ford Please enable JavaScript to view the comments powered by Disqus. Ultimos Contenidos Rock Clásicos Thin Lizzy Domingo, 26 de Marzo de 2023 Rock Noticias Sorteo: H-Sur presenta el espectáculo ''Timeless'' Sábado, 25 de Marzo de 2023 Rock Clásicos Deep Purple Sábado, 25 de Marzo de 2023 Rock Articulos Megadeth: Sed de venganza Viernes, 24 de Marzo de 2023 Rock Discos Depeche Mode Viernes, 24 de Marzo de 2023 Rock Shows Panico: acción y velocidad Viernes, 24 de Marzo de 2023 Rock Noticias En formato acústico: Hidalgo se suma a concierto de Soen Viernes, 24 de Marzo de 2023 Rock Clásicos Motörhead Viernes, 24 de Marzo de 2023